Esaú lleva el fútbol en la sangre. A su corta edad, acumula cantidad de premios gracias a su participación en campeonatos de fútbol y se perfila como un próximo integrante de la selección peruana.

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Esaú Quevedo Santos tiene apenas 8 años y ya ha ganado 12 medallas en torneos regionales y nacionales solo el año pasado. Y es que “el arquerito” como lo llaman sus familiares y amigos, lleva el fútbol en la sangre.

Foto: Esaú Quevedo

Su abuelo, su papá e incluso su hermano mayor, también jugaban la posición de arqueros. Era obvio que el pequeño Esaú se identificara con el deporte de la familia.

Esaú tiene la suerte de que toda su familia lo apoye a conseguir lo que quiere. Sin embargo, como siempre, hay obstáculos que hacen complicada su carrera de futbolista. El arquerito no gana siempre, pero cuando pierde, tiene el apoyo de toda quienes lo aman.

Foto: Esaú Quevedo

“Nosotros siempre estamos apoyándolo en todo. Vamos a sus partidos, hablamos con él  siempre, antes y después de cada partido. Le estamos enseñando a diario que el puesto se gana, que debe ir creciendo de a pocos y que no siempre va a ganar”, comenta Janet Santos, su orgullosa madre.

Gracias a su talento para el deporte y al apoyo de su familia y de sus allegados, Esaú ha logrado superar las derrotas y seguir creciendo con su equipo de la Academia San Antonio de Piura. Así demuestra que con trabajo duro, perseverancia y amor, incluso un pequeño futbolista de 8 años, puede cumplir sus sueños.

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