Como parte de su campaña de prevención de riesgos eléctricos y hurto de energía, personal de Enosa retiró más de 400 metros de cable de conexiones clandestinas en los caseríos El Gredal y San Pablo.

Un vocero de la empresa distribuidora de energía indicó que las conexiones clandestinas pueden provocar pérdidas materiales, electrocuciones, e incluso la muerte de quienes viven o transitan por la zona.

En el operativo se verificó que más de 600 familias de los sectores mencionados contaban con conexiones clandestinas de forma subterránea, sin medir los riesgos que ello pueda significar.

Personal de Enosa procedió a denunciar a los responsables de las conexiones clandestinas, quienes tienen financiamiento del Ministerio de Energía y Minas para realizar un proyecto de electrificación, sin embargo, deben esperar los plazos establecidos por la institución.

Por su parte, la empresa del grupo Distriluz brinda las facilidades a estos moradores para que dispongan del servicio de energía, a través de suministros provisionales de venta en bloque.

En las próximas semanas, Enosa continuará realizando estos operativos como parte de sus acciones correctivas.