El invierno ya está aquí y nutricionistas del Seguro Social de Salud han presentado recientemente una selección de “sopas power” que ayudarán a aplacar el intenso frío y mantenernos bien alimentados. Estas sopas son una combinación perfecta de carbohidratos, colágeno, vitaminas, antioxidantes, legumbres y hortalizas.
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Crema de zapallo
La crema de zapallo es rica en vitamina A y E, esenciales para proteger las mucosas, especialmente durante el invierno. La nutricionista Anni Cary sugiere cocinar el zapallo al vapor para conservar mejor sus antioxidantes. Una vez cocido, se machaca hasta obtener una crema, que se puede mezclar con caldo o leche para mejorar su sabor y consistencia. Esta sopa es ideal para fortalecer tu sistema inmunológico y prevenir resfriados.
Sopa de mote
El mote es un cereal que necesita una cocción prolongada, pero su alto contenido en fibra lo convierte en una excelente opción para combatir el colesterol. Nuestros antepasados lo consumían para enfrentar el frío y hoy en día sigue siendo una opción saludable y deliciosa para el invierno. Una sopa de mote bien cocida es nutritiva y saciante, perfecta para los días fríos.
Caldo de gallina
El caldo de gallina es un clásico que nunca falla. Sus ingredientes clave, como el kion y el ajo, le otorgan un sabor especial y numerosos beneficios para la salud. Esta sopa se prepara con hierbas aromáticas, una presa de gallina o pollo, y un huevo. Es una fuente excelente de proteínas, esencial para mantener una buena masa muscular durante el invierno.
Sancochado
El sancochado es una sopa rica en legumbres, tubérculos y hortalizas, proporcionando la energía necesaria para enfrentar el frío. Este plato incluye col, zapallo, garbanzos, apio, nabo, papa, yuca, y hierbas aromáticas como perejil y culantro. También lleva una porción generosa de carne magra, haciendo de esta sopa una opción completa y nutritiva.
Sopa criolla
La sopa criolla se destaca por su aderezo de ajo y cebolla, que contiene vitamina C resistente a la cocción. Esta sopa incluye fideítos de cabello de ángel y carne molida de bistec sin grasa, además de orégano y crutones de queso descremado. Es una combinación deliciosa y proteica, perfecta para los días fríos.
Sopa de quinua
Conocida como el «grano de oro», la quinua es ideal para brindar energía y calor en el invierno. Esta sopa no solo promueve el desarrollo muscular y el rendimiento mental, sino que también ayuda a mitigar el estrés. La sopa de quinua incluye verduras, ajo, cebolla, choclo, arvejas, habas, huacatay, papas y queso, creando un festival de sabores y nutrientes.
¿Son para niños?
Aunque estas sopas son muy nutritivas, la nutricionista Anni Cary explica que no son ideales para los niños como primer plato. Los niños tienen un estómago pequeño que puede llenarse rápidamente con el caldo, dejando poco espacio para otros nutrientes esenciales. Sin embargo, estas sopas pueden ser una excelente opción para la cena, acompañadas de un segundo plato más sustancioso.
Encurtido antigripal
Para complementar estas sopas, Cary recomienda un encurtido antigripal que puedes preparar fácilmente en casa. Solo necesitas dos cabezas de ajo, una taza de agua, una taza de vinagre, dos cucharadas de azúcar, una cucharadita de sal y algunas rodajas de kion crudo. Hervir los ajos por cuatro minutos, luego mezclarlos con el resto de ingredientes en un frasco y dejar reposar por un día. Este encurtido realzará el sabor de tus sopas y ayudará a fortalecer tu sistema inmunológico.
Disfruta de estas sopas ‘power’ durante el invierno y mantén a raya las enfermedades respiratorias mientras te mantienes cálido y bien alimentado.