La convivencia entre humanos y mascotas genera vínculos profundos que van más allá del afecto. Diversos estudios demuestran que los animales de compañía pueden adoptar comportamientos y rutinas similares a los de sus cuidadores, incluyendo aquellos relacionados con la alimentación y el ejercicio. Esta relación cercana puede tener consecuencias directas en su salud. Conoce cómo tu estilo de vida influye en el bienestar físico de tu perro o gato, especialmente en lo relacionado al sobrepeso y la obesidad.
Mascotas con sobrepeso: un reflejo del dueño
El vínculo emocional con las mascotas genera una convivencia que facilita la imitación de rutinas y comportamientos. Esta cercanía ha llevado a que muchos animales compartan con sus cuidadores no solo momentos del día, sino también sus hábitos alimenticios, incluyendo aquellos poco saludables.
Según investigaciones recientes, los perros con dueños que presentan obesidad tienen hasta cinco veces más riesgo de desarrollar sobrepeso. Este fenómeno se explica por la tendencia de algunos propietarios a utilizar la comida como forma de afecto o recompensa, tanto para sí mismos como para sus animales. La alimentación se convierte en un gesto emocional que muchas veces excede las necesidades reales del animal.
Además, muchas personas permiten que sus mascotas prueben alimentos que no forman parte de una dieta balanceada, incluso cuando los animales no lo necesitan. Prácticas como ofrecer sobras de comida, permitir que “piquen” entre horas o premiarlos constantemente con golosinas son comunes en hogares con poco control nutricional.
Sedentarismo compartido: menos paseos, menos salud
Otro factor determinante es la falta de actividad física. Los dueños con rutinas sedentarias tienden a aplicar el mismo ritmo de vida a sus mascotas. La escasa frecuencia de paseos, el tiempo limitado de juego o la falta de estimulación física son comportamientos que afectan directamente al peso del animal.
Esta situación se agrava por el desconocimiento generalizado sobre las necesidades alimentarias de los perros y gatos. Estudios revelan que solo uno de cada cinco propietarios sabe si su mascota tiene sobrepeso o le proporciona una dieta adecuada. Muchos ni siquiera la pesan regularmente.
Pequeños cambios, grandes resultados
Mejorar la salud de tu mascota empieza con tus propios hábitos. Alimentarte de forma equilibrada, controlar las porciones, evitar ofrecer comida no apta para animales y fomentar el ejercicio diario son acciones que benefician a ambos. Una mascota con un estilo de vida saludable no solo vivirá más, sino que disfrutará de mayor bienestar.
