Si tienes perros en casa y cuando lo llevas de paseo le jalas la correa sin querer para que no corran desesperadamente. ¡Te decimos por qué no hacerlo!

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Los tirones bruscos de la correa pueden causar daños en el perro, que pueden llegar a ser importantes para su salud. Las principales malestares se centran en el cuello, afectando también a las vértebras .

Esto lleva a que, en general, el perro tenga problemas de espalda porque los tirones van haciendo que el can adopte otra postura. Igualmente, cabe la posibilidad de que el can tenga hernias.

En general, las correas no producen dolor. Sin embargo, si los tirones son muy bruscos, el can sí puede llegar a sentirlo como consecuencia de esos calambres, contracturas, presión sobre las vértebras.

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