Cada año, la llegada de octubre ha significado una fiesta católica. Las calles se decoran con guirnaldas moradas, la venta de turrones se incrementa y el 18 de dicho mes los fieles acompañan en procesión al Señor de los Milagros, también conocido como Cristo Moreno o Cristo de Pachacamilla.
También puedes leer: El Señor de los Milagros: Historia de profunda fe y tradición
Historia del Cristo Moreno
En el siglo XVII, Lima crecía por las inmigraciones muy variadas. Había en ella personas de todas las razas, y muchos procedentes de las costas africanas. Entre ellos había cofradías que veneraban diferentes santos.
A mediados del siglo, los negros de Angola se ubicaron en Pachacamilla (llamado así porque allí había vivido indios del Pachacamac). Es así que formaron una cofradía y levantaron una edificación. Fue en una de estas estructuras que uno de las personas de color pintó en la pared la imagen de Cristo.
Primer terremoto
El 13 de noviembre de 1655, a las 2:45 de la tarde, un fuerte terremoto sacudió a Lima y Callao haciendo caer muchos edificios y causando miles de muertos. Los angoleños que eran ya muy pobres sufrieron muchísimo. Todas las paredes de su cofradía se cayeron. Pero en medio de aquello aparece el gran milagro: el muro de adobe con la imagen del Cristo permaneció en pie perfectamente preservada.
Ante el desastre, los limeños hicieron muchas peticiones al Señor. Había una profunda conciencia de que habían pecado y muchos pedían perdón.
Milagros
Posteriormente, 15 años más tarde, Antonio León de la parroquia de San Sebastián, encontró la imagen del Señor en la pared abandonada y comenzó a venerarla. Ocurrió entonces otro milagro, pues Antonio, que sufría por un tumor maligno de terribles dolores de cabeza, fue sanado cuando se lo pidió a Cristo ante su imagen. Aquel milagro le fortaleció en su fe y propagó por todas partes aquel don divino. Pronto muchas personas acudían al Cristo milagroso. La mayoría de ellos eran negros y pobres. Se reunían los viernes por la noche a rezar y cantar ante el Señor.
También puedes leer: ¿Sabías la historia del emblemático turrón de Doña Pepa? Acá te la contamos
Pero pronto comenzaron las dificultades. Aquellas reuniones atraían a toda clase de personas, no todas venían por buenas razones. Las autoridades intervinieron para prohibir las reuniones y mandaron a destruir la imagen de Cristo pintando sobre ella. La siniestra orden quiso llevarse a cabo en septiembre de 1671. Pero cuando el pintor trató de cubrir la imagen, fueron tanto los temblores y la impresión que sufrió que no pudo, aunque trató varias veces. Fue entonces que un soldado de Balcázar intentó un ultraje, pero tampoco logró hacerle daño a la imagen. Luego relató que, una vez frente a la imagen, vio que esta embellecía y que la corona se tornaba verde
Las autoridades no se dieron por vencidas, pero el pueblo comenzó a protestar. Informado el Virrey de lo acontecido, decidió revocar la orden y darle culto a la imagen. El 14 de septiembre de 1671, fiesta de la exaltación de la Cruz, se celebró la primera misa ante el Cristo de Pachacamilla.
Primera procesión del Cristo Morado
La primera procesión del Señor de los Milagros fue en el año 1687 luego del terremoto del mismo año. Después de esto, la fe se incrementó con mayor intensidad en los católicos por lo mismo que el muro que llevaba la imagen del Cristo Morado, resistió el movimiento que la naturaleza desató aquella vez.
También puedes leer: Catedral se ilumina de morado en honor al mes de fe y tradición
Las avenidas del Centro de Lima, se llenaban de feligreses recorriendo calles, templos, monasterios llenos de gente. Fue así que como el 28 de octubre se convirtió en el día festivo central del Señor de los Milagros, también conocido como «Cristo de Pachacamilla». Pasado el tiempo, una copia al óleo de la imagen fue hecha y es esta la que hoy en día recorre la ciudad de Lima. Esta procesión, ha pasado a ser una importante tradición religiosa peruana, y parte todos los años del convento de Las Nazarenas con la intención de desplazarse alrededor de la ciudad hasta retornar a su punto de partida.
Terremoto durante procesión
El 20 de octubre de 1687, sucedió un violento terremoto que según cronistas de la época duró más de 15 minutos. Y una vez más, la imagen del Señor de los Milagros, no cayó.
Sumando tantas conciencias y considerándolas como milagros, la imagen de Cristo Moreno visita desde 1688 el Hospital Arzobispo Loayza que en ese momento era el Hospital de Santa Ana para bendecir a enfermos y a todo su personal. Cada 28 de octubre de cada año se conmemora al ‘Señor de los temblores’ por el terremoto que resistió y que ocasionó muertes en el año 1746. Desde entonces la fe popular creció y sacaban por las calles cada mes de octubre por la frecuencia de los sismos.
VIDEO RECOMENDADO