Te encanta la Navidad. Decoras con múltiples adornos y luces por todas partes, sin imaginar que el exceso de luces juega malas pasadas. ¿Quieres evitar riesgos con las luces de Navidad y disfrutar de esta época como te mereces? Sigue estos 5 consejos.
¿Dónde coloco las luces de Navidad?
Es una de las grandes cuestiones que nos planteamos al iniciar nuestra decoración de Navidad. Como regla general, hay dos consejos que nunca fallan y ambos incluyen lo mismo: leer muy bien el etiquetado.
1. Dentro o fuera. Decídete, porque no todo vale
Antes de adquirir el juego de luces de Navidad que le dará vida a tu hogar, memoriza esto muy bien: las luces de interiores y las de exteriores no son iguales. En términos de electricidad no todo vale.
2. El lugar donde enchufarás tus guirnaldas luminosas importa
Este debe estar lejos de fuentes húmedas como el agua, así como lejos de fuentes de calor, como las estufas o los calentadores, con el fin de evitar incendios y sobrecargas.
3. Donde caben dos, no caben tres
Otro gran error que se suele cometer con las luces es el de emocionarnos y empezar a conectar luces por doquier en la misma toma. Si quieres evitar los cortocircuitos, intenta no conectar más de tres juegos.
4. El reciclaje de luces de Navidad sólo en perfecto estado
Por supuesto, la primera idea cuando adquieres un producto nuevo es que no sea de usar y tirar. Pero, ¡ojo! asegúrate que las luces estén en perfecto estado. Si alguna de sus bombillas está fundida, deshazte de las luces y ve por unas nuevas.
5. En iluminación navideña, menos es más
En términos de electricidad, no te la juegues. Claro que queda muy bonito que tu hogar brille todo el día y toda la noche, pero no exageres, mantén las luces encendidas únicamente cuando estés en casa.