El síndrome de ovario poliquístico (SOP) es un trastorno hormonal que afecta a mujeres en edad reproductiva y suele manifestarse desde la adolescencia. El diagnóstico es fundamentales para evitar complicaciones a largo plazo. Por eso, en el programa «Médico en casa» se entrevistó a la especialista en ginecología, Jennie Cecilia Burgos Bayona, quien dio detalles sobre los sintomas, causas y tratatamiento de este trastorno.
Síntomas del síndrome de ovario poliquístico
El SOP no es una enfermedad única, sino un conjunto de signos y síntomas que varían entre las pacientes. Algunos de los más comunes son:
- Alteraciones en el ciclo menstrual: puede presentarse como menstruaciones irregulares, ciclos que superan los 35 días o ausencia prolongada de la regla.
- Hiperandrogenismo: se manifiesta a través de acné severo, crecimiento de vello en zonas como el rostro, pecho, espalda o abdomen.
- Presencia de ovarios poliquísticos en la ecografía: los ovarios muestran múltiples folículos pequeños, lo que genera el aspecto de «quistes».
Para confirmar el diagnóstico, deben cumplirse al menos dos de estos tres criterios: irregularidad menstrual, signos clínicos o bioquímicos de exceso de andrógenos y ovarios con aspecto poliquístico en la ecografía.
Es importante destacar que en adolescentes el diagnóstico se realiza con cautela, ya que los cambios hormonales pueden simular temporalmente síntomas similares al SOP. Solo después de siete años desde la primera menstruación (menarquia) se puede considerar un diagnóstico definitivo.
Causas, factores de riesgo y tratamiento del SOP
Aunque no se ha identificado una causa única del síndrome de ovario poliquístico, se ha observado una fuerte relación con la resistencia a la insulina, antecedentes familiares de diabetes tipo 2 y obesidad. También existen mujeres delgadas que presentan SOP, lo que sugiere la existencia de diferentes tipos de presentación.
Tratamiento principal:
- Cambios en el estilo de vida: una alimentación saludable y ejercicio físico frecuente son los pilares del tratamiento inicial. Se recomienda realizar actividad física al menos cinco veces por semana.
- Terapia hormonal: si los síntomas persisten a pesar de los cambios en el estilo de vida, se puede recurrir al uso de anticonceptivos orales. Los más utilizados incluyen aquellos que combinan estrógenos con antiandrógenos como la ciproterona o drospirenona. La duración del tratamiento varía según la evolución de cada paciente.
- Metformina: este medicamento puede ser útil en pacientes con resistencia a la insulina, sobrepeso u obesidad.
En casos donde la paciente busca embarazo, se suspende el tratamiento anticonceptivo y se inicia un protocolo específico para fertilidad, que es distinto al tratamiento habitual del SOP.
Riesgos de no tratar el síndrome de ovario poliquístico
El no tratamiento del SOP puede traer consecuencias como:
- Infertilidad: alrededor del 20% de las pacientes con SOP puede presentar dificultades para concebir.
- Síndrome metabólico: incluye obesidad, resistencia a la insulina, hipertensión y dislipidemias, lo que aumenta el riesgo de enfermedades cardiovasculares y diabetes tipo 2.
- Engrosamiento endometrial: mujeres que no menstrúan regularmente pueden desarrollar hiperplasia endometrial, que en algunos casos requiere biopsia y tratamiento específico.
Además, las mujeres con SOP deben someterse a controles ginecológicos regulares, incluso después de la menopausia, especialmente si presentan factores de riesgo como sobrepeso o antecedentes familiares de diabetes.
Diferencias entre ovario poliquístico y síndrome de ovario poliquístico
No toda mujer con “ovarios poliquísticos” tiene el síndrome. La ecografía puede mostrar múltiples folículos en mujeres con ciclos menstruales normales y sin signos de hiperandrogenismo. En estos casos, no se trata de un SOP, sino de una variación ecográfica sin implicancia clínica.