De manera exitosa, se llevó a cabo la recolección selectiva de residuos orgánicos, en la II etapa de la Urb. Isabel Barreto. Así lo informó la Municipalidad de Paita.
Según la comuna, son más de 150 viviendas las que participan a diario en la recolección selectiva de residuos orgánicos, como: restos de verdura, cáscaras de frutas, restos de comida, entre otros.
En ese sentido, la coordinadora de la Unidad de Gestión de Residuos Sólidos, Luisa Paiva, mencionó que, durante la jornada de recolección, los promotores ambientales otorgaron bolsas de compost a los vecinos de este sector.
Esto, como parte de los beneficios por participar en la segregación de sus residuos.
Asimismo, Paiva Campos exhortó a los pobladores a que continúen participando de la recolección selectiva de residuos orgánicos y contribuyan al cuidado del ambiente.
Compost casero
Hacer compost casero es una actividad ideal para toda la familia, una forma perfecta de acercar la naturaleza a los más pequeños de la casa, de transmitir valores de consumo responsable, reciclaje, respeto por el medio ambiente, etc.
Preparar el compostador
El compostador es, simplemente, la caja o recipiente en la que iremos añadiendo las distintas capas de desechos que formarán nuestro compost casero.
Realmente puedes utilizar y reciclar casi cualquier cosa: una caja de madera, una base de tablones de obra, un tiesto o jardinera grande que ya no uses…
Cualquier recipiente te servirá siempre y cuando no esté en contacto directo con el suelo. De esta forma, si utilizas un tiesto o una caja de plástico, realiza unos agujeritos en la base y coloca una primera capa de tierra y una segunda de materiales secos como paja, restos de ramas de poda, serrín, etc. Estas primeras capas secas evitarán que el fondo de tu compostador se pudra y estropee la mezcla.
Añadir los desechos orgánicos
Algo que tienes que tener muy claro y transmitir a los niños y niñas de la casa es que el compostador no es un cubo de basura, sino un recipiente que luego servirá para enriquecer la tierra de nuestro huerto urbano o de las plantas de nuestras macetas.
En este contenedor añadiremos por capas diferentes productos o desechos, como peladuras de verduras y frutas, ramitas y hojas secas de los setos o plantas que hayamos podado, posos de café, cáscaras de huevo, etc.
Regar el compost casero
Nuestro abono orgánico casero necesita cierto grado de humedad para poder ir formándose ese fertilizante artesanal que enriquecerá nuestros cultivos ecológicos. Así, es necesario que la reguemos de vez en cuando sin encharcar el contenedor, pero procurando que la humedad penetre en las diferentes capas que hemos ido añadiendo a nuestra caja de compost.