Personal de Fiscalización de la Municipalidad de Castilla, junto al fiscal de Prevención del Delito de Piura, Armando Ortiz Zapata, clausuraron definitivamente cuatro restaurantes ubicados en la margen izquierda del río Piura, por no contar con licencia de funcionamiento y ubicarse en la faja marginal del río.

También puedes leer:

|Se restringe el tránsito en la carretera Chiclayo-Piura

|Senamhi: Al mediodía el río Piura alcanzaría su pico más alto

El operativo se inició en el bar -restaurante “La Ribera”, ubicado en la Av. Ramón Castilla S/N a un costado del puente San Miguel, de propiedad de Leonnardt David Valdez Crisanto, el cual fue clausurado definitivamente por carecer de autorización municipal de funcionamiento.

Asimismo, se procedió a la clausura del restaurante – cevichería “El Crucero”, ubicado en la Av. Irazola, junto al parque temático, por carecer de licencia de funcionamiento y no contar con los certificados de seguridad de Defensa Civil.

El restaurante “La Bendición de Dios”, ubicado frente al Open Plaza, que también se ubica en la margen izquierda del río Piura, cuya propietaria Victorio Zetas Rosas, habita junto a su familia en dicho lugar, corrió la misma suerte.

Los propietarios de estos locales, fueron multados con el 25% de una UIT, equivalente a S/1050.00 soles y se les instó a que proceden a desmontar y desocupar dichos espacios en el menor tiempo posible.

Asimismo, se supervisó la playa de estacionamiento del Open Plaza, cuya licencia de funcionamiento no estaba ubicada en un lugar visible, por lo cual se aplicó una multa del 6% de una UIT, equivalente, a S/252.00 soles. Asimismo, se le exigió la renovación de su certificado de defensa civil.

El burgomaestre castellano, José Aguilar Silva, quien participó del operativo, dio a conocer que desde los primeros días de su gestión, observó la construcción de dichos establecimientos, los cuales empezaron a funcionar hace dos años, luego del desborde del río Piura en el 2017.

“Desconocemos los motivos por los cuales la anterior gestión municipal les permitió asentarse en esta zona, en la cual está prohibida cualquier tipo de construcción, por ubicarse en la faja marginal del río Piura. Junto al fiscal de Prevención del Delito, estamos velando por la integridad de las personas que llegan hasta estos locales, los mismos que no cuentan con medidas de seguridad”, expresó el burgomaestre castellano.

Por su parte, el fiscal de Prevención del Delito, Armando Ortiz Zapata, señaló que estos locales no pueden volver a funcionar, porque se ubican en zona de alto riesgo. Además, los propietarios de dichos establecimientos no acreditan la posesión de estos espacios, infringiendo la Ley de Recursos Hídricos, por estar ubicados en la faja marginal del río Piura.

No te pierdas en Instagram:

En Twitter: