La idea de iniciar un show infantil le llegó a Angie Burga cuando estaba embarazada de su hijo, ahora de 6 años. No era una novata en este negocio, pues tenía la experiencia de haber trabajado por 5 años como animadora en el Show de July. Es así que el 16 de abril del 2014, un año después del nacimiento de su hijo, empezó “Mi mundo mágico”.
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El rol de su madre fue una fuerte influencia en la decisión de Angie. En un inicio, con poco material, pero con muchas ganas, fue su mamá quien le ayudó con su vestuario desde los zapatos hasta los vestidos que le coció.
“Ser animadora requiere vocación”
Para Angie, la importancia del show implica hacer sentir feliz y especial al pequeño y, al mismo tiempo, a los padres. Destaca el cuidado del vestuario y el servicio que ofrecen. “Nuestros trajes se caracterizan por ser elegantes y bonitos. Además, intento que mi animación siempre sea lo más correcta en mi forma de hablar y en el vocabulario que uso”.
Agregó que trabajar en un show infantil, requiere vocación. “Es una manera de generar ingresos, pero también debes sentir que te apasiona hacer felices a los niños”, señaló. Ella se describe como una persona emprendedora, ávida de conocimiento y con proyecciones grandes; esto lo ha demostrado con el tiempo y con sus logros.
El equipo de «Mi mundo mágico»
Lo que comenzó con un equipo de 5 personas, ahora es un elenco de aproximadamente 20 personas, incluyendo, desde la movilidad hasta el último muñeco con el que cuenta. Dentro del grupo tiene a sus incondicionales: su hermana Grecia, los bailarines y animadores: Eddy, Mariana, Mateo, Ángel, Álex y Annie.
Algo recurrente en sus shows son las enseñanzas que deja. “Les explico a mis niños que lo importante es participar, por eso todos se llevan su premio. Trabajamos con coreografías personalizadas para niños con habilidades diferentes e intentamos hacerlos partícipes del show, siempre con respeto”.
Siendo “la jefa”, Angie siempre intenta establecer un lazo de confianza con su equipo. Ella es la animadora principal, pero tiene muy en cuenta que el trabajo es de todos, por lo tanto, los premios y méritos son compartidos.
Logros y labor social
Uno de sus logros fue en el 2018, año en el que “Mi mundo mágico” ganó el segundo puesto en el corso organizado por la Municipalidad de Piura. Para ello, escogieron una temática de trajes reciclables, “mostrando nuestro compromiso con la preservación del medio ambiente”, indicó Angie.
Otra de sus características es que, a través de la animación realiza labor social. “A nosotros nos envían cartas, entonces, las analizamos y vemos con qué grupo trabajar. Hacemos hasta 2 animaciones ‘sociales’ por año, con un show bien elaborado”. Las últimas han sido para un grupo de niños venezolanos y una chocolatada para los niños de Pedregal
“Mi mundo mágico”, según Angie, representa el “mundo mágico que tienen los niños y que los adultos no pueden descifrar”. Por eso mediante su show, hace una invitación a ser partícipes de esta fantasía infantil, por y para los más pequeños del hogar.
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