La gastronomía peruana, reconocida mundialmente por su diversidad y exquisitez, vuelve a ser protagonista en el escenario internacional gracias a su amplia variedad de sopas ideales para combatir el frío. En una reciente clasificación realizada por Taste Atlas, un prestigioso sitio dedicado a explorar las culturas culinarias de diferentes países, se destacan estos platos como algunos de los más apreciados por los amantes de los sabores intensos.
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A pesar de la popularidad y el reconocimiento generalizado de la parihuela y el caldo de gallina, dos platos emblemáticos de la cocina peruana, el primer puesto en esta clasificación es sorprendente.
La segunda y tercera mejor sopa
En un reñido segundo lugar, con una puntuación de 4.1, se encuentran dos clásicos: la parihuela y el menestrón.
Sopa de parihuela (4.1)
Originada en las comunidades pesqueras del Perú, esta abundante y picante sopa de mariscos con sabores e ingredientes exclusivos peruanos era lo que los pescadores disfrutaban después de un largo día en el mar. Ahora es un plato popular en toda la costa peruana.
Tradicionalmente, las recetas de parihuela utilizan pescado blanco de carne firme como ingrediente principal, como el corte central de bacalao o lubina, cangrejos y una variedad de otros mariscos frescos. El ají panca, una variedad de chile peruano, da el sabor característico. lo que, incluso cuando se usa seco, le da al plato un bouquet floral impresionante.
La parihuela también tiene comino, jengibre, cilantro y jugo de lima, que la hace particularmente vigorizante.
Menestrón (4.1)
El Menestrón es una sopa peruana que se basa en el famoso minestrone italiano. Los primeros inmigrantes italianos popularizaron la sopa en Perú y, con el tiempo, se adaptó a los paladares peruanos utilizando una variedad de ingredientes peruanos que ya no tienen mucho en común con el clásico italiano.
Los ingredientes del menestrón varían según la región, pero generalmente se prepara con caldo de res, carne de res, guisantes, zanahorias, repollo, apio, choclo y papas. Curiosamente, no hay tomates en el menestrón.
Aguadito de pollo (4.0)
El aguadito de pollo es una sopa tradicional de Perú que se prepara con trozos grandes de pollo, ají amarillo, guisantes, maíz, cebolla, papa amarilla, arroz y cilantro, lo que le da su sabor y color verde característicos. Esta sopa es conocida en el país como un excelente remedio para la resaca. Pero también se prepara con frecuencia como un remedio para la gripe.
Debido a la gran popularidad de la sopa en Perú, existen diversas versiones que se preparan con diferentes ingredientes como pavo, pato, mejillones, pescado o vieiras en lugar de pollo. Por lo general, el aguadito de pollo se sirve en tazones grandes con rodajas de limón a un lado una vez que esté listo.
La mejor sopa peruana
Y así llegamos al primer puesto, la mejor sopa que tienen los peruanos y esta es: el chupe de camarones.
Este delicioso plato es originario de Arequipa. Se prepara con caldo de pescado, camarones frescos, cebolla, choclo, ajo, papas amarillas, guisantes, y se le agrega leche y trozos de queso al momento de servir, lo que le confiere un exquisito sabor. Con una puntuación de 4.2, el chupe de camarones se alza como el favorito indiscutible de los paladares exigentes.
Según Taste Atlas, el chupe de camarones evolucionó a partir de un espeso guiso arequipeño elaborado con papas, carne de llama y hierbas. Esta combinación de sabores auténticos y tradiciones culinarias ancestrales lo convierte en una verdadera joya de la cocina peruana.
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La mejor comida callejera
Además de estas deliciosas sopas, Taste Atlas también reconoce al Perú por su exquisita oferta de platos callejeros.
En este sentido, el anticucho de corazón de res se alza como el mejor plato callejero, con una puntuación de 4.5. Servido tradicionalmente con rodajas de papas hervidas, maíz y salsa de ají amarillo, el anticucho de corazón de res es una opción irresistible para los amantes de la comida callejera.
En resumen, la cocina peruana sigue conquistando los corazones y paladares de personas de todo el mundo, destacándose por su diversidad, autenticidad y exquisitos sabores.