Tras la activación de más unidades de la Nueva Refinería de Talara, Petroperú viene produciendo, desde las últimas dos semanas, combustible bajos en azufre, llegando a 30 000 barriles diarios, que, con la activación de más unidades de la planta, rozaran los 100.000.
En los próximos días, será la inauguración oficial de la planta estatal, la cual contará con la llegada de Dina Boluarte y otros funcionarios. Mientras tanto, se ha puesto en marcha distintas unidades de destilación producción y purificación de hidrógeno, como también otras unidades de procesos y auxiliares.
En tanto, la producción de la planta de Petroperú hoy —sin operar aún al 100%— es de 30 000 barriles diarios, que cuando llegue a su máximo nivel operativo, es decir, el despliegue de todas las unidades, ascenderán los 90 000 cada 24 horas.
El inicio de la producción de combustible bajo en azufre ya permite que la empresa estatal acceda a márgenes de ganancia de refinación, que superan los $30 por barril, casi tres veces más que en el año de cierre de la antigua refinería.
El regreso de los márgenes de ganancia
En diciembre del año 2019, la refinería de Talara cesó su producción para que se inicien las operaciones de la nueva planta estatal. Desde ese entonces hasta hoy, Petroperú importó todos los combustibles que vendía, dejándolo sin tener el margen de ganancia que otorga la refinación.
Petroperú pensó que la parada de la refinería sería corta, pero no fue así —la pandemia demoró la puesta en marcha del complejo petrolero— , y la empresa empezó a importar y competir en el mercado sin un margen de refino.
Ahora, después de tres años importando, Petroperú podrá tener un margen de ganancia por refinar el combustible que venden a los distribuidores mayores, lo cual implica el retorno al mercado de la refinería de Talara, señaló La República.
Aunque todavía no se produzcan los 95 000 barriles esperados, el expresidente de Petroperú, Humberto Campodónico, recuerda que la situación financiera del complejo estatal irá mejorando paulatinamente, para que ya no se repitan escenarios de falta de liquidez, que obligó al Gobierno a inyectarle S/4.000 millones como aporte de capital.