La Comunidad Campesina de Huabal está ubicada en el distrito de Sapillica, a 80 kilómetros en línea recta desde Piura, pero a más de 100 cruzando por una serpenteante y tortuosa trocha. En este territorio comunal existe un bosque seco de colina que se extiende sobre una superficie de 7 mil hectáreas.
En estas latitudes se desarrollan experiencias exitosas en favor de la inclusión educativa y que de replicarse, significarían un cambio importante en la perspectiva de vida de cientos de niños de la subcuenca del río Chipillico y Huabal.
La intervención de la Asociación Chira (CFPB) articulada con la Ugel y Municipalidad de Sullana ha sido exitosa, pues ha promovido una educación útil para los futuros ciudadanos de esta parte de la región.
La oferta de la educación básica regular en Huabal, priorizó por muchos años al nivel primario, a pesar de contar -como veremos más adelante- con una importante demanda para secundaria. Con solo dos docentes, los egresados de primaria apenas llegaban a los 7 u 8 niños al año.
Bajo este contexto pensar y gestionar condiciones para que más niños y niñas accedan a una educación útil en sus entornos y que además promueva la inclusión y el desarrollo de sus habilidades con equidad, ha sido sin duda la gran motivación de esta apuesta.
CEBA HUABAL EL INICIO
La creación de escuela secundaria en Huabal, es el resultado de varios esfuerzos, el primero de ellos corresponde a la propia Comunidad Campesina de Huabal, quien tomó la iniciativa y con el asesoramiento de la Asociación Chira y el respaldo de la DREP, consiguieron este importante logro por la inclusión.
En un principio se recomendó la creación de un“aula periférica” dependiente del Centro de Educación Básica Alternativa- CEBA de Sapillica. Más tarde la idea de tener un CEBA propio se cristaliza.
Así, nació el CEBA Huabal, con lo cual inmediatamente se gestionó contratar a los docentes e inicialmente se utilizó la infraestructura de la escuela primaria ya existente en este pueblo.
INICIATIVA INCLUSIVA
El CEBA Huabal destaca porque muestra una manera efectiva de gestión para asegurar que el sistema educativo peruano beneficie a los niños y niñas de los lugares más alejados y con menos oportunidades. Justamente por eso la educación inclusiva orienta a los estudiantes para aprovechar las potencialidades agro productivas de su localidad de manera sostenible, les permite trabajar en el campo por las mañanas, y estudiar en el CEBA por las tardes.
Esta puesta en marcha constituye una oportunidad de cambio tangible no solo para la población joven de Huabal, sino también para la del vecino caserío de Tasajeras –Sapillica.
ACCESO A TECONOLOGÍAS DE LA COMUNICACIÓN
Tan importante como la aplicación del enfoque productivo en esta experiencia, ha sido la incorporación de las nuevas tecnologías de la información y comunicación. En ese sentido el proyecto “Escuelas Rurales participativas con emprendimientos productivos sostenibles y acceso a TICS, apoyado por Xunta de Galicia, EDUCO y ejecutado por la Asociación Chira, ha permitido que ahora los estudiantes contar con una aula de TICS con acceso a internet, ampliando su posibilidades de relacionamiento y acceso a más información.
Los padres de familia complementaron el esfuerzo del proyecto con la construcción de un aula adicional de adobe para que sus hijos e hijas reciban educación. El acceso a internet fue posible gracias a una alianza con una empresa local que provee el servicio en la zona de Tambogrande y Las Lomas.
EDUCACIÓN PARA LA VIDA
En el CEBA Huabal los alumnos aprenden haciendo. Con el apoyo de Asociación Chira cuentan con una poza para la crianza de tilapias, lo cual ha permitido instalar un sistema de riego tecnificado para el uso eficiente del agua en la producción de diversos frutales, entre ellos el banano: “También producen abonos orgánicos. En estas actividades productivas también participan estudiantes de la escuela primaria, pues la idea es que los alimentos complementen la alimentación escolar de los programas del Estado”, señala Joel Troncos Castro, uno de los gestores técnicos de esta experiencia.
¿Y DESPUES DEL CEBA HUABAL?
Aunque la experiencia presentada es clave para que los jóvenes aprendan a gestionar sosteniblemente sus recursos, orientándolos hacia lo agropecuario, necesitan formarse en el nivel técnico superior para complementar lo aprendido en este CEBA: “La idea es que no se queden solo con la secundaria. Por ello, tenemos un acuerdo entre la Comunidad de Huabal y el CFPB Centro de Formación Profesional Binacional, para que puedan continuar una carrera técnica en nuestra institución” afirma Anyi Díaz Ruíz, coordinadora de proyectos de la Asociación Chira CFPB Centro de Formación Profesional Binacional, el único instituto técnico superior dedicado a ofrecer carreras de alta demanda para el sector agroproductivo. Marca además un modelo de educación alternativa y coherente con la realidad rural.