Desde el lunes 3 de febrero, miembros del Gremio de Pescadores Artesanales de San Pedro de Talara han realizado protestas que han bloqueado los accesos a la Refinería Talara, la Planta de Ventas Talara y el Patio de Tanques Tablazo. Estas acciones han generado serias preocupaciones debido a su impacto en garantías fundamentales como la libertad de tránsito y el derecho al trabajo, ambos protegidos por la Constitución Política del Perú.
Acuerdos incumplidos y consecuencias operativas
La empresa Petroperú lamenta profundamente que estas manifestaciones se lleven a cabo pese a haber cumplido cabalmente con todos los compromisos establecidos en el acta firmada el pasado 7 de enero de 2025 con representantes del gremio. Dichos acuerdos fueron ejecutados conforme a las normativas legales vigentes y comunicados oportunamente durante reuniones sostenidas con los líderes de los pescadores.
La Refinería Talara, considerada un activo estratégico para el país y un motor económico clave para la región Piura y el Perú, enfrenta ahora riesgos operativos significativos debido a estas protestas. Cualquier interrupción en sus actividades no solo afecta el abastecimiento local de combustibles, sino que también compromete la distribución nacional, poniendo en peligro sectores esenciales como transporte, salud y energía.
Llamado al diálogo y respeto a derechos fundamentales
Ante esta situación, Petroperú ha emitido un llamado público a los líderes del Gremio de Pescadores Artesanales de San Pedro para que cesen las manifestaciones que vulneran derechos fundamentales y obstaculizan el libre tránsito. La empresa insta a respetar los acuerdos alcanzados y evitar posibles acciones legales por parte de las autoridades competentes.
Al mismo tiempo, Petroperú reafirma su compromiso con el diálogo abierto y constructivo, buscando soluciones sostenibles dentro de un marco de respeto mutuo y responsabilidad social. La empresa reconoce la importancia de atender las demandas de las comunidades locales, siempre que estas se desarrollen de manera pacífica y dentro de los límites legales.
La continuidad operativa de la Refinería Talara es vital no solo para la economía regional, sino también para garantizar la estabilidad energética del país. Las protestas actuales podrían desencadenar escenarios críticos, incluyendo desabastecimientos de combustibles y pérdidas económicas significativas para diversos sectores productivos.