El actual gobernador de Piura, Luis Neyra, enfrenta una serie de desafíos económicos y proyectos paralizados que ha heredado de la gestión anterior. Unos de los más importantes es la paralización de 11 obras que, según estimaciones, han generado un perjuicio financiero de S/435.000.000 para el Gobierno Regional de Piura.
Estos proyectos que, originalmente estaban destinadas a beneficiar a alrededor de seis mil habitantes de la región, ahora se encuentran estancados, causando preocupación y malestar entre la población afectada.
Otro desafío significativo es el Plan Integral de Apertura (PIA) 2023, que heredó la administración actual. La gestión anterior aprobó un total de 360 obras en este plan, lo que equivale a un proyecto por día. Esta cifra ha dejado a la administración actual en una situación de incertidumbre y desafío logístico para priorizar y ejecutar los proyectos más urgentes y relevantes para la región.
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Presupuestos y objetivos
En cuanto al presupuesto, el Gobierno Regional de Piura ha proyectado un Presupuesto Inicial de Apertura (PIA) para el 2024 de S/3.997.860.000. Este monto se distribuye en un 66% para gasto corriente, que representa S/2.624.000.000 millones. Así como, un 34% para inversión, equivalente a S/1.373.000.000. Además, se solicitó una demanda adicional de S/1.173.863.858, de los cuales S/539.165.894 serán destinados a gasto corriente y S/634.697.964 a gasto de inversión.
El objetivo de esta solicitud adicional es cerrar las brechas existentes en los sectores de Educación y Salud, que han acumulado deudas históricas. Además, se busca fortalecer la infraestructura en el sector de Salud para garantizar su operatividad y mantenimiento.
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