Ayer, el joven Junior Ramírez (23) fue víctima de una caso de xenofobia por parte de un cliente, en Miraflores. El trabajador de la empresa Rappi se pronunció y cuenta cómo sucedieron los lamentables hechos.

El hecho se difundió en redes sociales un video en donde se puede apreciar a un hombre agrediendo verbalmente y con términos xenófobos a un repartidor extranjero porque tuvo un problema con su pedido, en Miraflores.

“Cuando llegué, empecé armando mi protocolo de bioseguridad y cuando voy a sacar el pedido para colocarlo sobre la banca, resulta que venía vencido por una esquina debido a la humedad, porque la bolsita de cartón es biodegradable”. Así empezó su relato el joven padre de una menor de un año a La República.

“Cuando yo lo levanto se sale el frasco por un costado, no se rompió nada, lo único que se salió fue el refresco. Entonces yo le digo al conserje que llame al señor para que baje, porque el cliente dijo que lo deje en recepción, pero yo quería explicarle la situación”, agregó.

En medio de esa complicación, se suma la actitud despectiva, prepotente e irrespetuosa del usuario. Pues al ver la situación lo acusa de ser el responsable, al no saber cómo transportar bien el alimento.

“El señor baja, le muestro su producto y en una se me va encima, empezándome a insultar. Luego yo saco mi celular y lo empiezo a grabar, pensé que con esto el señor se iba a contener un poco, pero no. Ya cuando el señor se me empieza a ir encima yo retrocedo y me acorrala contra las escaleras, no sé si pretendía golpearme o no”, indicó Ramírez.

Denuncia por agresión

Frente a este caso de xenofobia, el embajador de Venezuela en Perú, Carlos Scull, en Twitter, informó que se contactó con su compatriota y este miércoles le brindará la orientación necesaria para interponer la denuncia contra el sujeto que lo agredió de manera verbal.

Aún no he puesto denuncia, hoy hablaré con el embajador y me va a asesorar”, sostuvo Ramírez. También envión un mensaje a todas las personas que son parte de su rubro de trabajo para que no pierdan la tranquilidad ante los usuarios irrespetuosos.

“Debemos tener calma, hoy me están entrevistando por esto, tal vez si hubiese reaccionado de otra manera sería diferente. Lo único que yo pensaba es que no puedo perder este trabajo, es mi único ingreso, con esto yo puedo mantener a mi niña”, comentó.

Cabe resaltar que la grabación ha generado gran malestar entre usuarios de Twitter, quienes piden una profunda investigación para esclarecer la identidad del agresor.

De esa manera, se pueda ejercer una rápida reacción por parte de la Municipalidad de Miraflores. Pues, según los testigos, en el edificio solo funcionan oficinas de negocio, la mayoría inmobiliarias.

DATO. En Miraflores existe una ordenanza municipal que prohíbe todo tipo de discriminación, lo que incluye cualquier caso de xenofobia. Para la persona natural es una multa del 0,5 por ciento de la UIT y, si es de parte de un negocio, corresponde clausura inmediata.