Las autoridades del Ministerio de la Producción (Produce) y los pescadores artesanales de Sechura empezaron a dialogar y se acordó hacer ajustes a la aplicación de la Ley de Flagrancia en la pesca artesanal. Ha quedado instalada una mesa técnica en la que se analizará cuáles son los aparejos (redes) más adecuados para capturar el langostino y establecer las tallas en las que se puede extraer la caballa.
El viceministro de Pesquería, Juan Carlos Requejo, precisó que la Ley de Flagrancia no se puede suspender para el sector pesca. Pero se comprometió a realizar una evaluación casuística de cómo se aplica la norma a los pescadores artesanales, para mejorar su aplicación y determinar una reglamentación.
“El martes 28 de junio llegará un equipo de técnicos del Ministerio de la Producción para hacer un análisis al detalle y caso por caso sobre los temas que le preocupan a los pescadores, sobre los abusos y excesos que hay por parte de los inspectores del Produce”, manifestó Requejo.
Jacinto Antón, representante de los pescadores artesanales de Sechura, manifestó que no existe un estudio actualizado de la biomasa marina dentro de las cinco millas, por lo que exigió al Produce hacer uno para determinar en qué tallas se pueden extraer los recursos y cuándo deben establecerse las vedas. Por su parte, Fidel Periche, otro representante del gremio, resaltó que los pescadores hacen un arrastre selectivo, pero no industrial.
Al respecto, el viceministro aclaró que el arrastre no está permitido dentro de las cinco millas marinas. Por este motivo, se acordó que el 1 de julio se hará un experimento que determinará cuál es el aparejo adecuado para la pesca de langostino. Y sobre la caballa, Requejo refirió sí se podría permitir la pesca del recurso en tallas menores, siempre y cuando también se apliquen también vedas, puntos fijos de descarga y controles. La evaluación de este tema se hará el 7 de julio.