Una ciudadana venezolana, identificada como Katherine Katiuska Bello Serrano (34), fue detenida por la Policía Nacional cuando pretendía escapar hacia la frontera con Ecuador. La mujer es concuñada de Keillys Aguilera Meneses, principal sospechosa del asesinato de su esposo, Alexander Valverde Laines, cuyo cuerpo se encontró dentro de la maletera de un automóvil en Lima.
La intervención se realizó el domingo 5 de octubre, en el kilómetro 128 de la carretera Panamericana Norte, a la altura de la provincia de Talara. Agentes de la Policía de Carreteras de Los Órganos interceptaron un ómnibus interprovincial que partió de Lima con destino a Tumbes.
Durante la inspección, los efectivos ubicaron a Bello Serrano en el asiento 13. Ahí, comprobaron que sobre ella pesaba una orden de detención preliminar por siete días, dispuesta por el Segundo Juzgado de Investigación Preparatoria de la Corte Superior de Justicia de Lima mediante la Resolución N.° 1 del 4 de octubre de 2025.
Investigación continuará
El coronel PNP Carlos Morales, jefe de la División de Homicidios de Lima, informó que a la detenida se le trasladará a la capital. Esto con el fin de continuar con las diligencias correspondientes.
“La segunda persona, que es concuñada de la autora confesa del crimen, intentaba huir del país y ya fue capturada. Pesa sobre ella una medida de detención preliminar por siete días. Se le conducirá a la Dirección de Homicidios en Lima para continuar las investigaciones”, detalló el oficial.
Las autoridades investigan la posible participación de ambas mujeres en el asesinato del ciudadano peruano.
El macabro crimen en Breña
El caso conmocionó a la capital luego de que, el 2 de octubre, vecinos del jirón Huaraz, en Breña, alertaran a la Policía por un fuerte olor fétido proveniente de un vehículo estacionado. Al abrir la maletera, los agentes hallaron el cuerpo de Alexander Valverde Laines, envuelto en mantas.
Su esposa, Keillys Aguilera, confesó posteriormente haber asesinado a su pareja tras una discusión. Según su versión, le colocó somníferos en la bebida y lo asfixió mientras dormía. Mantuvo el cuerpo seis días debajo de su cama, donde incluso celebró el cumpleaños de su hijo menor, antes de esconderlo en el automóvil donde se le encontró.
La Policía Nacional continúa recabando pruebas para determinar si la concuñada detenida colaboró en el traslado o encubrimiento del crimen.