A pesar de las complicaciones originadas por la pandemia, la teleoperadora Entel continua impulsando el cumplimiento de los Objetivos de Desarrollo Sostenibles (ODS) planteados por Naciones Unidas.

Esto a través de programas como “Señas que Conectan” y “Reciclemos para transformar”, iniciativas que se adhieren a los objetivos 10 y 12, para fomentar la reducción de desigualdades al promover la inclusión social de poblaciones vulnerables y contribuir a gestionar correctamente nuestros residuos electrónicos.

Iniciativas sostenibles 

En este período, Entel ya ha capacitado a seis promociones de asesores con su programa “Señas que Conectan”. Lo cual busca contar con colaboradores que brinden atención en lenguaje de señas peruanas en cada una de las tiendas a nivel nacional. Para así eliminar todas las barreras de comunicación.

“Estamos muy contentos con los resultados que estamos logrando, hemos reducido el tiempo de atención a la mitad en personas sordas y el nivel de satisfacción se ha triplicado. Porque finalmente se sienten escuchados al momento de ser atendidos en lengua de señas. Todavía tenemos una tarea larga y continuaremos con el compromiso de conectar más y mejor a todos los peruanos”; explica Rosa Bonilla, jefa de Gestión de Reputación y Desarrollo Sostenible de Entel Perú.

Así, Piura tiene en sus filas a seis asesores que están encargados de brindar una atención personalizada y distintiva. Quienes se convertirán en promotores de la inclusión y diversidad, con el propósito de fomentar el desarrollo social en su ciudad.

Organización sin fines de lucro

Cabe recordar que el programa “Señas que Conectan” se realiza de la mano de MAW, una organización sin fines de lucro que incentiva la mejora de la calidad de vida de las personas con discapacidad auditiva

Asimismo, con el objetivo de seguir contribuyendo con la comunidad y los piuranos, Entel continua con su programa “Reciclemos para Transformar”, lanzado en el 2016, para fomentar el reutilizamiento de artefactos electrónicos mediante la instalación de tachos de reciclaje en sus tiendas.

De esa manera, se recolecta RAEE como celulares, pilas y cargadores, que luego son procesados para poder darle una nueva vida a los componentes que aún se pueden aprovechar y desecharlos de manera responsable con el ambiente debido a que son peligrosos para el ecosistema. Desde el 2016, se ha recolectado más de 200 toneladas de artefactos electrónicos a nivel nacional.

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