La historia sísmica del Perú registra más de 140 terremotos de considerable y gran magnitud. 15 de ellos por encima de los M8 y otros 20 entre los M7.5 y M7.9. Así lo informó el Instituto Geofísico del Perú (IGP), entidad adscrita al Ministerio del Ambiente.
A propósito de conmemorarse el próximo 31 de mayo un año más de la terrible tragedia de los pueblos de Yungay y Ranrahirca en Ancash, que acabó con más de 67 mil vidas; el presidente ejecutivo del IGP, Hernando Tavera, afirmó que el Perú es un país de terremotos y aún con una sociedad sin cultura de prevención.
Precisó que 35 de los más intensos terremotos han ocurrido en los últimos 50 años. De estos, 8 sacudieron y causaron daños y muertes en Arequipa, 5 en Ica, 5 en Tacna, entre otras regiones del país.
Según el historial sísmico del IGP, se estima que los eventos más intensos se produjeron el 9 de julio 1586 en Lima y Callao que, de acuerdo a los daños registrados, habría sido de M8.6, aproximadamente.
Asimismo, el 13 de agosto de 1866 en Tacna (M8.6 aprox.) y el 28 de octubre de 1746 en Lima y Callao (M8.4) que fue acompañado de un tsunami y destrucción en ambas ciudades. El terremoto M7.9 en Pisco, Ica, del 15 de agosto del 2007 dejó 597 muertos.
Políticas de gestión
En el caso del terremoto de 1970 (M7.8), con epicentro en Chimbote, Tavera señaló que es el más recordado. Ello, no por el daño causado, sino por uno de sus efectos secundarios, como lo fue el desprendimiento de un bloque de hielo del nevado Huascarán, que sepultó a ambas localidades.
Recordó que este evento marcó un hito en el cambio de las políticas de gestión del riesgo de desastres en el país. En el caso de la ciencia, el IGP recibió, hace dos años, el apoyo del gobierno para concretar el proyecto del Sistema de Alerta Sísmica Peruano (SASPe).
Esta iniciativa consiste en la implementación de 106 estaciones sísmicas para proteger a 18 millones de habitantes que residen en las regiones costeras del país. Además, debe concluir este año 2021 y estar operativo en el 2022.