El Congreso aprobó una nueva ley que impone condiciones más estrictas para los extranjeros que deseen obtener la nacionalidad peruana. Entre las principales modificaciones se establece un periodo mínimo de residencia de cinco años en el país. Así como, la obligación de demostrar ingresos mensuales superiores a S/ 4 400, lo que equivale a más de S/ 53 000 al año.
Nuevos criterios y evaluaciones
La normativa también exige que los solicitantes acrediten conocimientos en historia, geografía, arte, cultura y Constitución peruana. Además, de carecer de antecedentes policiales y judiciales. En los casos de nacionalización por matrimonio, el tiempo de convivencia con el cónyuge peruano se amplía de dos a cuatro años.
Justificación de la medida
De acuerdo con especialistas, estos cambios buscan fortalecer la seguridad jurídica y nacional, garantizando que los futuros ciudadanos tengan permanencia estable en el país y medios económicos suficientes para su sustento. El énfasis en la seguridad nacional se orienta a prevenir riesgos vinculados con el terrorismo y otras amenazas al Estado.
Críticas y cuestionamientos
Sin embargo, expertos advierten que la norma difícilmente impactará en el crimen organizado, ya que quienes integran estas estructuras no recurren a los procesos de nacionalización. En cambio, el requisito económico podría afectar a migrantes que viven legalmente en el Perú, pero cuyos ingresos no alcanzan el umbral exigido.
Algunos ciudadanos extranjeros consultados consideran que el monto es “desproporcionado” en relación con las condiciones laborales del país y señalan que esta barrera dificulta su integración plena.
Un cambio en la política migratoria
Con estas disposiciones, la ley marca un giro en la política migratoria peruana al endurecer los plazos y requisitos para acceder a la nacionalidad. Aunque fija criterios más claros, el debate permanece abierto respecto a su verdadera eficacia frente a la inseguridad transnacional, que demanda medidas de cooperación internacional más amplias.