Después de 19 años, los bosques secos del norte del país reverdecen para cambiar el paisaje de miles de hectáreas desérticas y continuar siendo el sustento de miles de familias; gracias a las lluvias del denominado ‘El Niño Costero’.

Tras una reunión entre los pobladores de Monte Castillo, en el distrito de Catacaos, y el ministro de Agricultura y Riego, José Hernández, se llegó al acuerdo de poner en marcha la de un sistema para aprovechar las tierras húmedas que dejaron las lluvias en Piura.

Según se supo, hace dos meses los agricultores de dicha localidad sembraron 20 kilos de semillas de algarrobo en aproximadamente 250 hectáreas y cinco hectáreas de frijol caupi como cultivo temporal; para así aprovechar el periodo de lluvias en la región.

En compañía de los responsables en Piura del Servicio Nacional Forestal y de Fauna Silvestre (SERFOR) y de Agro rural, Hernández informó que implementarán un programa de promoción de cultivos temporales, como frijoles, maíz, menestras, zapallos, entre otros, para aprovechar la humedad de las tierras. Dicho programa alcanzaría hasta 10 mil hectáreas e incluye un financiamiento no reembolsable de semillas, fertilizantes y maquinaria de hasta S/ 1,000 a los beneficiados.

Por su parte, Juan Otivo Meza, responsable de la Administración Técnica Forestal y de Fauna Silvestre (ATFFS) Piura, oficina descentralizada del SERFOR, precisó que gracias a las lluvias, los bosques secos recuperarán un importante porcentaje de vegetación y favorecerán la regeneración natural de especies forestales como el algarrobo, el palo santo y el hualtaco.