La lúcuma es considerada uno de los superalimentos peruanos por sus notables propiedad nutricionales y versatilidad de consumo. Es por ello que recientemente, en un ranking elaborado por Taste Atlas la coloca en el top 10 de las 100 las mejores frutas del planeta.
“La lúcuma es una fruta originaria de la región andina de América del Sur, especialmente de los valles de Perú, Bolivia y Ecuador. Se caracteriza por un alto valor nutricional, ya que está lleno de calcio, proteínas, hierro, zinc y betacaroteno. Su sabor se describe mejor como ligeramente dulce, lo que lo convierte en un ingrediente ideal para postres horneados y helados”, señala Taste Atlas al referirse a esta fruta.
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Agrega que “originalmente, la lúcuma era llamada oro de los Incas y era vista como símbolo de fertilidad. Hoy en día, se puede encontrar en la mayoría de los mercados regionales de enero a abril”.
Descripción de la lúcuma
Este fruto oriundo del Perú, cuya denominación botánica es lúcuma obovata, es una especie arbórea, perteneciente a la familia de las sapotáceas. Crece en territorios ubicados a nivel del mar hasta los 3,000 metros de altitud, con temperaturas de 8°C a 27°C y una humedad de 80 % a 90 %.
La lúcuma es una baya esférica, cónica o comprimida basalmente, con cáscara delgada de color verde o amarillo bronceado. La pulpa es de color amarillo intenso que le confiere el sobrenombre de “oro de los incas”, así como textura harinosa, consistencia suave, con sabor y aroma muy agradables.
Origen ancestral
El origen de la lúcuma se remonta a tiempos ancestrales. Una leyenda relata que una diosa andina se negaba al amor, hasta que un ser mitológico, disfrazado de mendigo, la conquistó con una fruta de lúcuma, que en la mitología inca representa la fertilidad.
Valor nutricional
La lúcuma tiene un elevado valor nutricional, es buena fuente de carbohidratos, rica en minerales y vitaminas. La pulpa representa entre el 69 % al 82 % del total del fruto. En estado fresco aporta 99 kilocalorías, mientras que cuando se convierte en harina llega a 329 kilocalorías.
Es rica en vitaminas del complejo B, como niacina (B3), tiamina (B1), riboflavina (B2) que son fundamentales para el desarrollo muscular; y vitamina C o ácido ascórbico que estimula la creación de colágeno y aporta elasticidad a los tejidos.
Asimismo, contiene minerales como calcio, fósforo y hierro, esenciales para prevenir la anemia, la desnutrición y reforzar el sistema inmune. También es rica en potasio que contribuye a la buena salud cardiovascular, favorece la disminución de posibilidades de ataques cardiacos, entre otras propiedades.
Fuente: Andina
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