En conversación con Walac Noticias, el presidente de la Junta de Usuarios de San Lorenzo, Bruno Fossa, indicó que para superar el déficit hídrico y paliar la crisis en la agricultura, es necesario “rogar a Dios que llueva”. 

Con respecto a las lluvias registradas esta mañana en distintas zonas de la región, Fossa indicó que “dan esperanza” a aquellos agricultores cuyas tierras están “sedientas”. Pero señaló que se necesitan lluvias continuas para poder contrarrestar la sequía. 

“En este momento una gota nos hace sonreír. Pero tenemos que esperar. Lo que necesitamos son una seguidilla de lluvias para que comience a discurrir el agua al reservorio San Lorenzo, incluso hacia el chira. Hoy por hoy es muy prematuro hacer fiesta por estas 4 gotas que han caído. Hay que agradecerle a Dios. Pero no es el momento de hacer fiesta“. Así lo indicó Fossa Villar.

Asimismo manifestó que, por el momento, no hay solución para el déficit hídrico. Sin embargo, señaló que las autoridades deben trabajar en medidas preventivas.

Con el déficit hídrico no hay nada que hacer, simplemente hay que rogar que llueva. Lo que se tiene que hacer son las prevenciones. Así como se quiere prevenir la inundación, se tiene que prevenir la sequía”, sostuvo.

Lluvias en Piura

Por su parte, Matt Nieto, especialista en meteorología del Senamhi, indicó, para Walac Noticias, que, inicialmente se pronosticaron lluvias, desde el 27 hasta el 28 de noviembre.

No obstante, según las últimas actualizaciones, se prevé que estas continúen hasta el 29 de noviembre”. 

En el ámbito agrícola, el especialista indicó que es es necesario resaltar que, «para el beneficio de los reservorios tendría que haber una mayor frecuencia en las lluvias. No necesariamente que tengan una mayor intensidad».

“Si uno espera lluvias muy intensas, estas pueden favorecer a las zonas bajas por la cantidad. Pero también puede afectar ocasionando daños en algunas viviendas o pueden haber huaicos», agregó.

Por eso, según el meteorólogo, «lo que se espera de la naturaleza es que haya una mayor frecuencia de lluvias. Es decir, que hayan más días con lluvia porque esto beneficiaría no solamente a las zonas altas, sino a las bajas y medias de la región».