La pobreza en el Perú habría incrementado un 6% en el 2020, alcanzando al 27.5% de la población debido a la pandemia de la COVID-19. Esto según estimaciones del Fondo Monetario Internacional (FMI).
El impacto pudo ser peor, pues la organización calcula que el nivel de pobreza hubiera incrementado un 10%, si el Gobierno no otorgaba bonos a las familias vulnerables.
Sin embargo, señalan que esto no bastará ante la segunda ola de la pandemia y la lenta recuperación económica.
El actual bono de S/ 600 que se está entregando en las zonas de riesgo extremo solo disminuiría los niveles de pobreza en 0.7%. Por ello, el FMI señala que el Ejecutivo debería evaluar la entrega de un nuevo bono.
Según indican en su análisis de la situación económica del Perú, el Gobierno reduciría la pobreza a niveles prepandemia (20.8%) con un bono equivalente a S/ 2,760.
Este nuevo subsidio debería ser entregado a los beneficiarios de los programas Juntos y Pensión 65, hogares en condiciones de pobreza en zonas urbanas o rurales. Además, a aquellos con miembros que no son asalariados formales en el sector público o privado, y que ganan menos de S/ 3,000.
Pero, ¿cuánto costaría esta medida al Estado peruano? El FMI estima que el costo de aplicación de esta medida sería de 2.3% del PBI, es decir, cerca de S/ 17,250 millones.
Otra opción es un bono de S/ 1,530 para los mismos beneficiarios mencionados anteriormente, el cual costaría alrededor de S/ 9,750 millones. Esta medida permitiría reducir la pobreza a 23.6% este año.