El proyecto para que gas natural llegue a los domicilios de 64 mil piuranos sigue atrasado. Recién en julio, la Dirección General de Hidrocarburos (DGH) le responderá a Promigas sobre la reconsideración que le presentó para seguir participando en la concesión del gas.
Promigas considera que para hacer posible la distribución del gas en la región, los ductos de la terminal Malacas, propiedad de la Empresa Eléctrica de Piura (EEPSA), deben usarse. Pero hasta el momento la DGH desaprobó la propuesta e indicó que el nuevo concesionario debe habilitar sus propios ductos de gas.
Por este motivo es que Promigas ha pedido a la DHG que reconsidere su decisión. La respuesta se conocerá en julio. Si el trámite no procede, la empresa presentará un recurso de apelación ante el Viceministerio de Energía.