Una grave situación sanitaria se detectó en los exteriores del Instituto Penitenciario de Piura, ex Río Seco, tras una supervisión realizada por la Defensoría del Pueblo – sede Piura, en coordinación con la Municipalidad Distrital de Castilla. En el lugar se constató la acumulación de más de 300 toneladas de residuos sólidos, lo que representa un serio peligro para la salud de internos, trabajadores y visitantes.
La inspección permitió verificar que los desechos se encuentran almacenados a un costado del establecimiento penitenciario, generando condiciones insalubres que desencadenarían problemas respiratorios, infecciones y la proliferación de vectores.
Más de 4 mil personas expuestas a contaminación
Según el reporte, la situación afecta directamente a más de 4 000 internos, así como al personal del INPE encargado de la custodia del penal. A ello se suma el impacto negativo en los familiares que acuden diariamente a visitar a los reclusos. Ellos deben soportar fuertes olores y un ambiente poco saludable.
La basura permanece acumulada desde hace varios días, agravando el riesgo sanitario y aumentando la posibilidad de focos infecciosos en la zona.
Recojo insuficiente y necesidad de apoyo urgente
Durante la supervisión, los funcionarios advirtieron que el servicio de limpieza brindado por la municipalidad resulta insuficiente para atender el volumen de residuos existente. Se determinó que resulta indispensable el uso de maquinaria pesada adicional para lograr el retiro total de la basura en el menor tiempo posible.
Ante este escenario, la Defensoría del Pueblo exhortó al Gobierno Regional de Piura a adoptar medidas inmediatas, en el marco del principio de cooperación interinstitucional, para evitar una emergencia sanitaria de mayores proporciones.
Piden intervención de Fiscalía Ambiental y OEFA
Asimismo, se recomendó la participación de la Fiscalía Especializada en Materia Ambiental y del Organismo de Evaluación y Fiscalización Ambiental (OEFA), a fin de evaluar las responsabilidades y garantizar que no se continúe exponiendo a la población a riesgos innecesarios.
Cabe destacar que en los alrededores del penal existen asentamientos humanos, cuyos habitantes también se verían seriamente afectados si el problema no se atiende de manera inmediata.

