Si tienes una moto debes saber que al igual que los autos requieren de un cuidado especial, por eso aquí te tienes algunos consejos de cómo cuidar tu moto para mantenerla siempre lista para un recorrido extraordinario y seguro.
PASOS
- Limpieza: Para no dañar el esmalte e identificar algunas averías lo primero que debes hacer es limpiar tu moto. Lávala con productos jabonosos suaves bajo la sombra, utiliza esponjas y abundante agua en baldes y para los lugares donde se acumula suciedad usa cepillos suaves para retirar las impurezas.
- Nivel de aceite: Lo puedes comprobar con una varilla la cual indica el nivel en el que se encuentra. Ten en cuenta que un motor gasta más lubricante por desgaste o por calor, por tal razón se recomienda usar un lubricante 100% sintético que proporcione máximo rendimiento para todas las motos.
- Los neumáticos: Los neumáticos son una parte fundamental, por lo que debes mantenerlos en perfecto estado. Lo primero que debes tener en cuenta es usar las llantas adecuadas e infladas a la presión correcta. Esto lo debes comprobar con la llanta en frío ya que al calentarse el aire que llevan dentro aumenta y falsea datos. Asimismo, verifica que no haya desgaste en la banda de rodamiento, grietas o aberturas.
- Frenos: Comprueba que tanto las pastillas delanteras como las traseras estén en óptimas condiciones. Si tu motocuenta con frenos de disco deberás controlar el nivel de los líquidos mirando los depósitos, así como que el circuito no tenga pérdidas. Si los frenos son de tambor regula la tensión del cable hasta que el tacto y la frenada sean los adecuados.
- Cadena: Es el responsable de transmitir el poder y la fuerza desde el motor hacia la rueda trasera ym requiere de un mantenimiento especial. La cadena debe estar tensada de acuerdo a lo que dice el manual de la moto; además, comprueba que no esté estirada o desgastada.
- Líquido refrigerante: Si el motor de tu motose refrigera a través de líquido y no por aire es importante comprobar el nivel del líquido refrigerante; para ello debes verificar que el nivel en el vaso de expansión se encuentra entre el máximo y el mínimo, así podrás determinar si la rellenas o sustituyes. Recuerda que nunca debes abrir el tapón del radiador en caliente ya que podrías sufrir graves quemaduras.