La maternidad saludable y segura es un objetivo prioritario para reducir riesgos durante el embarazo y proteger tanto a la madre como al bebé. En el programa “Médico en Casa”, el Dr. José Delio Flores Collanqui comparte recomendaciones sobre controles prenatales, suplementos vitamínicos y hábitos de vida que deben seguir las gestantes. Conocer los cuidados esenciales permite disminuir complicaciones y garantizar una gestación segura y consciente.
Controles prenatales y evaluación médica
El primer paso hacia una maternidad saludable comienza antes de la concepción. Según el Dr. José Flores, ginecólogo, es fundamental que la mujer revise su estado de salud previo al embarazo, incluyendo enfermedades crónicas como diabetes, hipertensión o problemas cardíacos. Una vez confirmado el embarazo, se recomienda acudir a controles médicos en los primeros tres meses para evaluar la ubicación del embarazo, descartar complicaciones y definir la viabilidad del feto.
Durante el seguimiento, la paciente debe realizar al menos seis controles prenatales que incluyen:
- Evaluación del peso y estado nutricional.
- Descartes de enfermedades como VIH, sífilis, diabetes e hipertensión.
- Ecografías para determinar número de fetos y desarrollo adecuado.
- Evaluación del riesgo de preeclampsia y otras complicaciones.
Alimentación, suplementos y hábitos saludables
Una alimentación balanceada es clave durante la gestación. El Dr. Flores recomienda priorizar proteínas como pescado, pollo y legumbres, así como verduras y frutas variadas. Además, los suplementos esenciales incluyen:
- Hierro: Para prevenir anemia en la madre y el bebé.
- Ácido fólico: Fundamental para la formación del tubo neural; debe iniciarse al menos tres meses antes de la concepción.
- Calcio: Reduce riesgos de complicaciones como preeclampsia.
El embarazo no limita la actividad física; siempre que la gestante no tenga infecciones ni complicaciones, puede mantener rutinas normales y actividad sexual segura.
Riesgos y seguimiento especializado
Durante la gestación, las defensas de la mujer disminuyen para proteger al bebé, aumentando la susceptibilidad a infecciones urinarias o vaginales, que deben ser descartadas incluso si son asintomáticas. Otro riesgo a considerar es la incompatibilidad Rh: si la madre es Rh negativa y el bebé Rh positivo, se recomienda la administración de suero anti-D entre las semanas 28 y 32 y dentro de las primeras 72 horas tras el parto para prevenir complicaciones en embarazos futuros.
En cuanto a la COVID-19, no se ha demostrado transmisión vertical del virus al bebé durante la gestación ni a través de la lactancia, aunque se deben mantener medidas de protección respiratoria.
Recomendaciones finales para un embarazo seguro
- Prepararse antes de concebir: iniciar ácido fólico y realizar evaluaciones médicas.
- Acudir a los controles prenatales mínimos (6 visitas), ajustando según contexto sanitario.
- Mantener alimentación balanceada y consumo de suplementos indicados.
- Realizar actividad física y mantener hábitos saludables según indicaciones médicas.
- Monitorear signos de alerta, como hinchazón excesiva, dolor pélvico intenso o presión arterial elevada