El cáncer infantil es una enfermedad que afecta a niños y adolescentes entre los 0 y 19 años. Su diagnóstico temprano puede marcar la diferencia en las posibilidades de curación. En el programa “Médico en Casa”, la doctora Rosdaly Yesenia Díaz Coronado, especialista en oncología pediátrica, explicó cuáles son los principales signos de alerta que deben tener en cuenta padres, madres y cuidadores.
¿Qué es el cáncer infantil y por qué es importante detectarlo a tiempo?
El 15 de febrero se conmemora el Día Internacional del Cáncer Infantil, una fecha clave para generar conciencia sobre esta enfermedad y sus diferencias en tratamiento según los recursos del país. Según la doctora Díaz, el cáncer infantil comprende todo tipo de neoplasias malignas en niños y adolescentes, siendo la segunda causa de muerte en este grupo etario.
Los tipos de cáncer más frecuentes en la infancia son:
- Leucemias
- Linfomas
- Tumores cerebrales
En Perú, se estima que cada año se presentan alrededor de 1,800 nuevos casos en menores de 19 años. Aunque la cifra puede parecer baja, se trata de una población vulnerable, cuyo diagnóstico afecta tanto al paciente como a su entorno familiar.
Principales signos de alerta del cáncer infantil
La especialista explicó que existen señales de alerta que deben ser tomadas en cuenta, aunque no necesariamente indiquen la presencia de cáncer. Es fundamental mantener la calma, pero también estar atentos a ciertos síntomas persistentes y sin causa aparente.
Estos son algunos de los signos más comunes:
- Fiebre persistente: cuando aparece sin una causa clara y se repite, incluso después de tratamientos médicos.
- Cansancio o astenia: los niños suelen ser activos; si un menor muestra pérdida de energía, deseo constante de dormir o falta de interés por jugar, es motivo de consulta.
- Palidez: si se presenta junto a otros síntomas como cansancio o moretones, puede estar relacionada con alteraciones en la sangre.
- Moretones sin causa aparente: los niños suelen golpearse jugando, pero si aparecen hematomas en zonas como la espalda, abdomen o si no desaparecen con el tiempo, deben ser evaluados.
- Puntos rojos en la piel: podrían indicar una baja cantidad de plaquetas.
- Bultos o ganglios inflamados: en el cuello, axilas o abdomen.
- Dolores de cabeza intensos y frecuentes: especialmente si despiertan al niño por las noches.
- Problemas en la visión: como el reflejo blanco en los ojos, pueden ser señales de retinoblastoma, un tipo de cáncer ocular.
La doctora Díaz enfatizó que estos síntomas no significan automáticamente que un niño tiene cáncer, pero sí deben motivar una evaluación médica oportuna.
Diagnóstico, tratamiento y rol de la familia
El diagnóstico inicial suele realizarse a partir de exámenes clínicos básicos como un hemograma completo. Según el nivel de atención, se pueden solicitar ecografías, radiografías o biopsias. Cuando hay casos de sospecha alta, los pacientes son derivados a centros especializados.
En la actualidad, el tratamiento del cáncer infantil en Perú está centralizado en Lima y otras regiones como Chiclayo, debido a la falta de personal especializado. “En el país hay alrededor de 40 oncólogos pediátricos, cifra insuficiente para la demanda existente”, indicó la doctora Díaz.
Los tratamientos incluyen:
- Cirugías
- Quimioterapia
- Radioterapia
El tipo y duración del tratamiento dependerán del tipo de cáncer diagnosticado. Además, la especialista descartó la eficacia de tratamientos alternativos sin base científica.
Finalmente, la doctora subrayó la importancia del acompañamiento familiar. El entorno del niño juega un papel clave en su recuperación. La reintegración escolar y social también debe ir acompañada de sensibilización en la comunidad para evitar el estigma.