Familiares de cinco de los trece trabajadores desaparecidos en el distrito de Pataz, en La Libertad, confirmaron que son procedentes del sector Dos Altos, en distrito de La Unión, en Piura. Ante ello, pidieron a las autoridades intensificar las labores de búsqueda de sus seres queridos que habrían sido secuestrados el pasado 25 de abril, tras un ataque en un socavón vinculado a la minera Poderosa.
«A través de unos amigos que trabajan con ellos nos dieron aviso de lo sucedido. Después, por WhatsApp nos pusimos en contacto con mi sobrino quien nos manifestó que fueron atacados por presuntos delincuentes que ingresaron a la minera. Hasta ayer, en la noche, nos comunicamos con él, luego ya perdimos contacto», dijo la tía de uno de los jóvenes secuestrados, que pidió no ser identificada.
Cinco personas desaparecidas en Pataz
Ante el temor de represalias, los familiares no brindaron los datos de estos cinco jóvenes desaparecidos, pero señalaron que se trata de dos hermanos y dos primos, mientras que el quinto sería un amigo de estos jóvenes que llegaron a trabajar a dicho lugar. Según precisaron, tres de ellos son obreros y los otros dos son vigilantes.
Ante esta situación, solicitaron la intervención del Ministerio del Interior y la Policía Nacional de Perú para la búsqueda de los jóvenes que llevan casi tres días desaparecidos. «Pedimos a las autoridades que los busquen. Nosotros estamos lejos. Hasta ahora no sabemos nada de ellos. Tememos que les haya pasado algo malo. Por favor ayúdennos«, indicó.
¿Qué pasó en la minera Poderosa de Pataz, La Libertad?
Un grupo de familiares de 13 trabajadores que prestaban servicios de seguridad para la empresa R&R denunciaron la desaparición de sus parientes desde el último sábado 26 de abril. De acuerdo con medios nacionales, los trabajadores fueron secuestrados por alias ‘Cuchillo’ y su banda.
Primeras investigaciones arrojan que los delincuentes pedirían la suma de S/4 millones para liberarlos. Sin embargo, este dato aún no ha sido confirmado oficialmente.
La Policía Nacional del Perú inició una investigación para determinar el paradero de los trece vigilantes desaparecidos. Según las autoridades, podría tratarse de una organización criminal que opera en la zona minera de Pataz y estaría implicada en actividades de robo de mineral.