Con una sonrisa radiante y una mirada decidida, Joselín Brillid Domínguez Vilela se alza como una de las figuras destacadas del Carnaval Cataquense Bicentenario. Representando a la bandera Amarilla Canaria, esta joven de 19 años no solo busca conquistar el cetro, sino también inspirar a otros a superar sus propios límites. Su historia es un ejemplo de perseverancia, amor por sus raíces y compromiso con su comunidad.
Una representante orgullosa de sus raíces
Joselín nació y creció en Catacaos, una tierra conocida por su rica historia, gastronomía exquisita y artesanía única. Con apenas 19 años, mide 1.61 metros y lleva consigo un cuerpo contorneado fruto de su pasión por el baile, especialmente la salsa y la cumbia. Sus cabellos negros ensortijados, su rostro bronceado y sus ojos achinados reflejan la belleza natural que caracteriza a las mujeres de su región.
Criada bajo los valores inculcados en el colegio Virgen del Carmen y posteriormente en el emblemático Juan de Mori, Joselín aprendió desde pequeña el valor del esfuerzo y la importancia de forjar sueños. Hoy, mientras estudia Farmacia en el Instituto Otto Tonnsman, comparte su tiempo ayudando a su madre Magali Vilela, quien dirige un local de venta de cenas en Nuevo Catacaos.
El carnaval siempre ha sido parte de su vida. Desde niña, Joselín disfrutó del jolgorio, la música y los colores que caracterizan esta celebración. Para ella, el carnaval no es solo diversión; es una oportunidad para mantener viva una tradición que define la identidad de su pueblo.
Un reto personal y colectivo
Ser candidata al cetro del Carnaval Cataquense Bicentenario no ha sido fácil para Joselín. Reconoce que salir de su zona de confort ha sido uno de los mayores desafíos. A pesar de su experiencia como integrante de un show infantil, enfrentarse al escrutinio público y asumir el rol de representante le ha exigido valentía y dedicación.
“Para mí es un reto y una gran oportunidad”, confiesa Joselín. “Quiero demostrar que podemos lograr grandes cosas si nos atrevemos a dar el primer paso”. De ser elegida soberana, su objetivo principal sería motivar a los jóvenes a perseguir sus sueños sin temor.
Con firmeza, añade: “Les diría a los jóvenes que caminen a su propio ritmo, que no se adelanten a quemar etapas. La verdadera esencia está en disfrutar el camino”.
Preparación y fe: Las claves de su camino
Joselín ha invertido tiempo y esfuerzo en su preparación. Entre ensayos de baile, coreografías y estudios para responder a las preguntas del jurado, su rutina diaria refleja disciplina y compromiso. Sin embargo, no todo se trata de técnica y estrategia. Como buena cataquense, Joselín confía plenamente en su fe para enfrentar este desafío.
A pesar de la competencia, Joselín destaca el compañerismo entre las candidatas. “Todas somos amigas”, asegura. “Hemos entendido que este es un momento para disfrutarlo y pasarla bien, siempre pensando en el buen nombre de Catacaos y el carnaval, que todas adoramos”.
Catacaos, un destino turístico único
Joselín no pierde la oportunidad de resaltar la grandeza de su tierra natal. Catacaos, con su historia centenaria, su gastronomía reconocida y su artesanía incomparable, es un lugar que merece ser visitado. “Es un lugar turístico muy bonito que exalta a quienes lo visitan”, afirma con orgullo.
Más allá de la competencia, Joselín Brillid Domínguez Vilela representa la esencia de una mujer trabajadora, soñadora y comprometida con su comunidad. Su participación en el Carnaval Cataquense Bicentenario no solo busca coronar su esfuerzo, sino también dejar un legado de inspiración para las futuras generaciones.