En forma espontánea los cataquenses cantaron “Tu reinarás”, mientras sonaban los aplausos, vítores, surgidores y se encendía un castillo de fuegos artificiales.
El motivo, a las 5.40 salía del templo, la sagrada imagen del Cristo resucitado, tras haber escuchado desde las 4 a.m. la misa de resurrección presidida por el arzobispo metropolitano, Monseñor José Antonio Eguren Anselmi.
Con paso lento y fuertes palma, llegó al frontis de la municipalidad donde el alcalde en su oración dio gracias por el alimento material recibido de miles de damnificados y ahora, por la palabra de Cristo, que es más valiosa.
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Cieza señaló: “Gracias, así, enorme, grande con voz en alto es lo que nace de las gargantas y corazón de quienes fuimos perjudicados con la salida del río. Catacaos te dice a ti, Señor Resucitado, que lo tuyo no son palabras bonitas y huecas. No, nada de eso, tu mensaje diario es de Vida, de Amor, de una entrega total tuya para salvarnos a todos nosotros, tus hijos pecadores”.
Tras ello se produjo el encuentro entre Jesús y su madre, con lo cual se pierde el luto y se gana una nueva oportunidad de vida.
Ante un templo totalmente colmado de fieles monseñor dijo durante su homilía: “A pesar del dolor que aún nos embarga, a pesar de la inmensa tarea de reconstrucción que tenemos por delante, los invito en esta mañana de resurrección a que nos digamos los unos a los otros: «Feliz Pascua»”.
Catacaos se fortaleció en su fe y este año, gracias a la generosidad del depositario y doliente, se entregó los 7 potajes a quienes fueron los más afectados por la salida del río.
