La Universidad Nacional de Piura (UNP) atraviesa un nuevo capítulo en su crisis institucional. Esto ocurre tras la renuncia irrevocable de Santos Montaño Roalcaba, quien cumplía prisión domiciliaria y enfrentaba una investigación por presunta corrupción. La decisión se produce después de que un video lo mostrara recibiendo S/10 mil soles de un proveedor dentro de las instalaciones de la universidad. Este hecho, divulgado por el programa “Cuarto Poder” el 11 de agosto, causó gran impacto y aumentó la tensión en la comunidad universitaria.
La renuncia se oficializó mediante una carta notarial dirigida al rector encargado Enrique Cáceres. En el documento, Montaño pidió que su dimisión sea elevada y aprobada en la Asamblea Universitaria. Argumentó razones de salud y la necesidad de proteger los intereses de la institución como principales motivos para dar este paso. La misiva, que incluye su firma y huella digital, recalca que la renuncia es de carácter irrevocable.
El caso
El caso cobró relevancia nacional debido al material audiovisual grabado el 19 de mayo de 2023. En el video, el proveedor asegura que el dinero corresponde a servicios prestados a la universidad. Este incidente generó serios cuestionamientos sobre la gestión de Montaño y la transparencia en los procesos administrativos de la UNP.
Conforme a los estatutos universitarios, tras la dimisión del rector, el encargado de la oficina central debe convocar a elecciones en el menor plazo posible. Este proceso permitirá que estudiantes y trabajadores elijan a un nuevo rector para liderar la institución durante los próximos cinco años. La comunidad universitaria espera que esta renovación impulse una etapa de mayor transparencia y estabilidad para la golpeada universidad.