El Ministerio de la Producción (Produce) estableció que las embarcaciones pesqueras artesanales de cerco con capacidad de bodega entre 10 y 20 metros cúbicos podrán capturar hasta nueve toneladas de bonito por faena, con una tolerancia adicional de una tonelada por embarcación. Esta disposición busca mantener un control sostenible del esfuerzo pesquero en el litoral peruano.
Nueva regulación para la pesca del bonito
La medida se oficializó a través de la Resolución Ministerial N.º 000338-2025-Produce, que modifica el límite de captura del recurso bonito (Sarda chiliensis chiliensis) durante el presente año. Según explicó el ministerio, la norma tiene como objetivo garantizar la sostenibilidad del recurso. Además de promover una extracción responsable y acorde con la capacidad biológica de las especies marinas.
Estado saludable del recurso, según Imarpe
De acuerdo con un informe técnico del Instituto del Mar del Perú (Imarpe), la población del bonito se mantiene en un estado biológico saludable. Ello debido a que la biomasa desovante se encuentra por encima del nivel de referencia, mientras que la mortalidad por pesca se mantiene por debajo del límite máximo sostenible.
No obstante, el organismo científico recomendó reforzar los controles y la vigilancia pesquera para evitar una explotación excesiva o prematura que pueda afectar el equilibrio del ecosistema marino.
Supervisión y cumplimiento de la norma
El Produce señaló que la Dirección General de Políticas y Análisis Regulatorio en Pesca y Acuicultura, la Dirección General de Pesca Artesanal y la Dirección General de Supervisión, Fiscalización y Sanción serán las encargadas de difundir y hacer cumplir la medida, en coordinación con los gobiernos regionales y la Dirección General de Capitanías y Guardacostas de la Marina de Guerra del Perú.
Compromiso con la pesca sostenible
Con esta decisión, el Ministerio de la Producción reafirma su compromiso con la pesca responsable y la conservación de los recursos hidrobiológicos, en concordancia con la Ley General de Pesca y las recomendaciones técnicas del Imarpe. La medida forma parte de una estrategia integral para preservar la riqueza marina y garantizar el sustento de las comunidades pesqueras a largo plazo.