Obstetras del centro de salud I-4 de Huancabamba atendieron un parto vertical a Disney Neyra Naira, quien manifestó que, en esa posición, se sentía más cómoda, y, además, fue acompañada en todo el trabajo de parto de su pareja Wilmer Guevara Melendres.
La paciente alumbró a un varoncito que pesa 3 kilos 150 gramos y mide 49.5 centímetros. Después de estar hospitalizada el tiempo que indica la norma, ambos jóvenes enrumbaron muy ilusionados con su primogénito a su natal Catulún.
La Obst. Edith Adrianzen refirió que los beneficios más resaltantes del parto vertical son: se acorta el periodo expulsivo, se experimenta menos dolor; y reduce la posibilidad de desgarros.
Además, al permitir el acompañamiento de un familiar, se logra que la gestante se sienta más segura durante el parto.