El Arzobispo de Piura, José Antonio Eguren, anunció para la alegría de muchos fieles católicos, la reapertura de las iglesias y templos en Piura desde este lunes 3 de agosto.
El Monseñor Eguren Anselmi, en conversaciones con Walac Noticias, informó sobre algunos detalles a puertas de esta próxima reapertura.
Ya como lo había anunciado en un comunicado, el Arzobispo de Piura precisó que, por el momento, las iglesias y templos solo se abrirán para la oración y visita privada de los fieles.
Las misas, los sacramentos, u otros actos de culto colectivos no se llevarán a cabo por el momento, debido a que primero se evaluará esta primera etapa de inicio.
Asimismo señaló que cada párroco ha ido preparando a un grupo de laicos voluntarios para el recibimiento de las personas. Ellos verificarán el uso de las mascarillas, la correcta aplicación del alcohol, la distancia establecida en los asientos, entre otros aspectos.
Sobre el tema de los horarios, indicó que estos puede variar. «Cada párroco va a fijar la hora en la que tendrá el templo abierto. Ya cada uno lo informará este fin de semana a los fieles», señaló.
Asimismo las misas se seguirán transmitiendo a través de las redes sociales. «Vamos a ver cómo nos va en esta primera etapa, y de acuerdo a esto ya podremos derrepente dar un siguiente paso para reanudar las celebraciones y sacramentos», señaló.
Eguren Anselmi también envió un mensaje a los fieles católicos que están próximos a acudir a los templos: «Recen mucho por el fin de la pandemia, con esa fe que caracteriza a los piuranos, por la curación de los que están enfermos. También recen mucho por el descanso eterno de los hermanos que han fallecido».
“Tengan mucha fe que dentro de poco vamos a comenzar, poco a poco, a restablecernos”, finalizó.
Festividades
Con el tema de las festividades religiosas, las cuales congregaban a cientos de devotos en años anteriores, el monseñor Eguren indicó que, por el momento, seguirán con la modalidad de procesión llevando las imágenes por las distintas calles de Piura.
Esto debido a que no están permitidos los actos masivos de religiosidad popular, como las procesiones. Ya que podrían convertirse en una gran fuente de contagio del covid-19.