Un equipo médico especializado del Hospital de Apoyo II-2 de Sullana realizó una exitosa cirugía de reconstrucción anorrectal conocida como “anorrectoplastía sagital posterior” en un recién nacido con una malformación congénita que impedía su correcta alimentación.
La condición del menor, que llevaba dos días sin comer, representaba un grave riesgo de desarrollar obstrucción intestinal y distensión abdominal. Tras una evaluación exhaustiva, los especialistas intervinieron quirúrgicamente, logrando corregir el problema y garantizar su recuperación.
El bebé, que ahora se encuentra estable, ha comenzado a ganar peso y ya puede alimentarse con normalidad. La madre del menor expresó su gratitud hacia el equipo médico:
“Nos devolvieron la esperanza cuando pensábamos que no había solución. Mi hijo ahora puede tomar su leche y seguir mejorando”, dijo.
El cirujano pediatra Julio Lozada Castillo destacó la importancia del diagnóstico temprano en estos casos. En ese sentido, exhortó a los padres a buscar atención médica inmediata ante cualquier señal de alerta en sus recién nacidos.