La licenciada Claudia Agüero, nutricionista de Solidaridad Salud, señaló que muchos de los productos lácteos que actualmente se venden en el mercado contienen diferentes aditivos nutricionales a los que se les atribuye efectos colaterales para la salud humana.
“La mayoría de las etiquetas empleadas en los alimentos procesados no muestran el verdadero contenido nutricional o emplean términos complejos que confunden al consumidor y lo dejan con muchas dudas, haciendo imposible que haga una buena elección”, manifestó Agüero.
Peligrosos
Entre los diferentes aditivos nutricionales que incluyen estos productos mencionó la carragenina – obtenida por la extracción de algas marinas rojas-, conocida en el mundo de los etiquetados como E407 o SIS 407.
“En muchos países este espesante natural, utilizado en la industria de los lácteos y en la panificación, no es recomendado para gestantes y niños, puesto que se le atribuye la aparición de úlceras intestinales y alergias. En la Unión Europea, por ejemplo, no está admitido como un aditivo en las comidas para bebés de menos de tres meses y medio desde 1992”, precisó la nutricionista.
Fuente: Perú 21