En una entrevista con Walac Noticias, el Dr. Enrique Cruz explicó cómo la falta de servicios básicos como agua potable, desagüe y espacios adecuados en los barrios de Piura contribuye al aumento de enfermedades como el dengue, la leptospirosis y las infecciones respiratorias.
El dengue y la falta de agua:
Aunque el 2025 no corresponde a un pico alto de dengue, ya que —según el ciclo natural del zancudo— este debería ser un año de baja incidencia, los casos continúan apareciendo en la región. Una de las causas, según el especialista, es la acumulación de agua en recipientes domésticos, práctica común debido a la escasez del servicio en muchas zonas de Piura.
“La falta de agua ocasiona que la gente almacene en recipientes, donde se forma el zancudo del dengue si no se tapan bien o no se mantiene una higiene adecuada. Esto también produce enfermedades gastrointestinales, que son tan comunes en Piura”, explica el Dr. Enrique Cruz.
Leptospirosis y desagües colapsados :
Otra necesidad básica, además del agua potable, es una red de alcantarillado en buen estado. Sin embargo, los desagües se encuentran colapsados en distintas zonas de Piura, especialmente en la ciudad de Sullana. También en sectores de Paita y Talara. Según el Dr. Enrique Cruz, esta situación ha favorecido un aumento significativo de casos de leptospirosis en el 2025.
“La leptospirosis es una enfermedad que se transmite principalmente por la orina de los roedores en aguas contaminadas”, explica el médico. “Por eso es fundamental que las poblaciones cuenten con un sistema de saneamiento adecuado, acceso a agua potable y una disposición segura de excretas”.
El especialista añade que esta enfermedad se vuelve especialmente preocupante durante las lluvias:
“Al estar asociada con el agua contaminada, se convierte en una amenaza cuando hay aniegos o desbordes, ya que estas condiciones crean focos infecciosos”, advierte.
Un sistema muy débil ante nuevas enfermedades
En mayo de 2025, la Diresa Piura emitió la Alerta Epidemiológica N.º 002‑2025 ante el riesgo de ingreso de tos ferina (coqueluche), tras el aumento de casos reportados en países vecinos. Aunque los contagios en la región han sido pocos y aislados, volvieron a poner en evidencia las debilidades estructurales del sistema de salud regional.
Otra enfermedad que ha incrementado este año, y que está preocupando a la población ha sido la neumonía. El Dr. Enrique Cruz señaló que el sistema de salud en Piura es altamente deficiente, especialmente en zonas alejadas como Ayabaca, Huancabamba o Tambogrande, donde no hay hospitales ni médicos, y los pocos establecimientos existentes “no tienen lo mínimo para una atención básica”. Además, advirtió que “el personal de salud muchas veces es contratado, no hay continuidad en su trabajo, no hay un incentivo, entonces se van”, lo que agrava la falta de atención en regiones donde también escasean medicamentos.
“Todo se centra en Piura o en Sullana, y eso tampoco se abastece”, indicó, y explicó que esta precariedad impide una respuesta rápida ante brotes como los de dengue, leptospirosis u otras enfermedades.
La tos ferina y los antivacunas:
A pesar de las limitaciones estructurales, Cruz sostiene que el programa de vacunación se mantiene como una de las estrategias más sólidas: “Aunque las personas vivan en las zonas más alejadas, si el personal de salud se entera que hay un niño sin vacunar, lo va a buscar. El personal de salud está comprometido con la vacunación, hacen vigilancia activa, salen a buscar a los niños casa por casa para completar los esquemas de vacunación”.
Sin embargo, tras la pandemia de COVID-19, el especialista advierte que la desinformación ha provocado un rechazo creciente hacia las vacunas. “El personal llega, pero la gente no quiere vacunarse, no aceptan, incluso a veces se esconden”, lamenta. Esta situación ha facilitado la propagación de enfermedades como la tos ferina en distintos países y representa un riesgo latente para regiones vulnerables como Piura.
Aunque la región enfrenta condiciones estructurales difíciles, la prevención sigue siendo una herramienta fundamental. Mejorar el acceso a servicios básicos, fortalecer el sistema sanitario y combatir la desinformación son tareas urgentes para evitar que enfermedades prevenibles sigan cobrando víctimas en el norte del país.