El cómputo de votos en Bolivia avanza en medio de una jornada electoral relativamente tranquila que podría marcar un cambio político tras 20 años de hegemonía del Movimiento al Socialismo (MAS). Aunque se registraron incidentes menores, como enfrentamientos en el Chapare, las autoridades electorales informaron que estos no alteraron el proceso. Los sondeos prevén un retroceso del oficialismo y un posible ascenso de los postulantes de centroderecha Samuel Doria Medina y Jorge Quiroga.
Incidentes aislados durante la votación en Bolivia
El presidente del Tribunal Supremo Electoral, Óscar Hessenteufel, confirmó que los comicios transcurrieron sin alteraciones de gravedad. Uno de los episodios más relevantes ocurrió en el Chapare, bastión de Evo Morales, donde detonó un explosivo cerca del colegio donde votó Andrónico Rodríguez, presidente del Senado y candidato de la Alianza Popular.
Rodríguez fue agredido con piedras por un grupo de personas, lo que provocó su retirada del lugar. Su jefe de campaña resultó herido y debió ser internado. Pese a los incidentes, la votación continuó con normalidad en la mayoría de regiones.
Candidatos de centroderecha lideran los sondeos
Los resultados preliminares anticipan una derrota del MAS, que gobernó Bolivia desde 2006. Los principales postulantes que encabezan las encuestas son el empresario Samuel Doria Medina y el expresidente Jorge Quiroga (2001-2002), ambos representantes de la centroderecha.
Ninguno aparece con probabilidades de imponerse en primera vuelta, lo que obligaría a una segunda instancia. Para ganar directamente se requiere más del 50% de los votos válidos o un mínimo del 40% con diez puntos de diferencia sobre el segundo lugar.
Doria Medina aseguró que “a través del voto podremos salir de esta crisis de manera pacífica y democrática”, mientras Quiroga pidió sufragar “para cambiar la historia del país”.
MAS y transición política en Bolivia
El actual candidato del oficialismo, Eduardo del Castillo, se ubica entre los últimos lugares de las preferencias. El presidente Luis Arce, quien no participa en la contienda, declaró que respetará los resultados y garantizó una transición ordenada en el marco del Bicentenario de Bolivia.
Por su parte, Evo Morales llamó a anular el voto y denunció posibles bloqueos en el Chapare al cierre de la jornada. El exmandatario acudió a sufragar sin precisar si su voto fue nulo. Morales advirtió en declaraciones a AP que aún evalúa qué posición tomar en caso de que la derecha llegue al poder, cuyos líderes han prometido procesarlo judicialmente.
Observadores internacionales supervisan el proceso electoral
El proceso electoral boliviano cuenta con la supervisión de 82 observadores de la Unión Europea, de los cuales 32 permanecerán en el país a largo plazo. Asimismo, la Organización de los Estados Americanos (OEA) desplegó 87 observadores bajo la dirección del exministro colombiano Juan Fernando Cristo.
Con información de AP News.