Las autoridades de Indonesia encontraron a un bebé orangután dormido en una maleta. Este había sido drogado por un traficante ruso que planeaba sacarlo del país.

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En marzo, las autoridades de Indonesia detuvieron a Andrei Zhestkov en el aeropuerto cuando trataba de regresar a Rusia. Al revisar sus maletas encontraron a un bebé orangután durmiendo adentro.

El orangután tenía apenas dos años edad y se encontró junto a leche para bebés, mantas, dos gecos y cinco lagartos vivos.

Por este delito, el hombre fue condenado a un año de cárcel en julio.

Tras esto, las autoridades de conservación de Bali prepararon el traslado de Bon Bon -así nombraron al bebé orangután – a un centro de conservación en Sumatra.

Los bosques del archipiélago del sureste asiático son unos de los lugares con mayor biodiversidad en el mundo. Lamentablemente, esto lo lo convierte en el objetivo de muchos traficantes de animales.

Otro caso

El pasado fin de semana, las autoridades de Sumatra detuvieron a dos hombres sospechosos de pertenecer a una red internacional de tráfico.

Los delincuentes intentaban vender cuatros cachorros de león y uno de leopardo de África, junto a docenas de tortugas.

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