Un gran montículo de residuos hospitalarios arrojados en la ribera del río movilizó esta mañana a las autoridades de la dirección de Salud ambiental de la Diresa y del Organismo de Evaluación y Fiscalización Ambiental (Oefa), en una medida de prevención al atentado contra la contaminación ambiental y la salud de las personas.
Las autoridades llegaron hasta la clínica El Chipe. En el interior de este de establecimiento sanitario, el propietario se negó a brindar las facilidades a los inspectores tanto de la Oefa como de Salud Ambiental para acceder a la parte posterior del establecimiento, pese a que había una puerta de acceso a la zona donde se había arrojado la basura.
Previamente los inspectores habían advertido en la propiedad contigua que en la parte posterior de la clínica se había arrojado gran cantidad de basura, al parecer hospitalaria, lo que constituye una atentado contra el ambiente y la salud de las personas.
El funcionario adelantó que se informará a la fiscalía del medio ambiente para que intervenga de inmediato y de esa manera comprobar de dónde se ha originado esta disposición irregular de los residuos hospitalarios. Ruiz adelantó que este tipo de operaciones continuará en salvaguarda del cuidado del ambiente y de la salud de las personas.