El Ejército de Estados Unidos confirmó el inicio de una ofensiva militar de gran magnitud contra posiciones del Estado Islámico (EI) en territorio sirio, como respuesta al ataque ocurrido la semana pasada en la provincia de Homs, donde murieron dos soldados estadounidenses y un intérprete que los acompañaba.
La operación la anunció el Comando Central de Estados Unidos, que precisó que las acciones están dirigidas contra infraestructura clave y depósitos de armamento utilizados por el grupo extremista.
Ataque responde a emboscada mortal contra tropas estadounidenses
Según la información oficial, la ofensiva se ejecuta en represalia directa por la emboscada registrada el 13 de diciembre, cuando un atacante del EI abrió fuego cerca de la ciudad de Palmira, causando la muerte de los tres ciudadanos estadounidenses.
Las autoridades militares señalaron que este ataque marcó el primer incidente fatal para tropas de Estados Unidos en Siria desde la caída del régimen de Bashar al Assad el año pasado, lo que elevó la alerta de seguridad en la zona.
Operación se denominó “Ataque Ojo de Halcón”
Poco después del anuncio militar, el secretario de Defensa de Estados Unidos, Pete Hegseth, confirmó en redes sociales que la ofensiva se bautizó como “Operación Ataque Ojo de Halcón”. Asimismo, dejó en claro que esta acción no representa el inicio de una nueva guerra, sino una respuesta directa contra los responsables del atentado.
El funcionario remarcó que cualquier ataque contra ciudadanos estadounidenses tendrá consecuencias severas, asegurando que las fuerzas de su país perseguirán y neutralizarán a quienes atenten contra sus tropas, sin importar el lugar donde se encuentren.
Bombardeos se extenderían por varias horas en el centro de Siria
De acuerdo con fuentes oficiales citadas por medios internacionales, los ataques se concentran en diversas zonas del centro de Siria. Para ello, se estarían utilizando aviones de combate, helicópteros artillados y fuego de artillería pesada contra decenas de presuntos objetivos del Estado Islámico.
Las mismas fuentes indicaron que la operación podría prolongarse durante varias horas, dependiendo de la respuesta y los resultados obtenidos en el terreno.
Mientras tanto, el gobierno estadounidense reafirmó su postura de no tolerar agresiones contra sus fuerzas desplegadas en el extranjero. Asimismo, reiteró que mantendrá la presión militar contra los remanentes del EI en la región.

