La Municipalidad Provincial de Piura puso nuevamente en funcionamiento el Puesto de Auxilio Rápido del puente San Miguel, un espacio que permaneció inutilizado durante más de 15 años y que se había convertido en un punto crítico por su deterioro y falta de control. Desde ahora, contará con vigilancia permanente de la Policía Nacional y apoyo del Serenazgo, reforzando la seguridad en uno de los accesos más concurridos entre Piura y Castilla.
Reconstrucción acelerada para recuperar un área insegura
El local presentaba daños severos: muros deteriorados, ausencia de puertas, falta de servicios básicos y un entorno convertido en refugio para actividades delictivas. La zona también carecía de iluminación adecuada. La rehabilitación, ejecutada en cuatro días, incluyó instalación de energía eléctrica y agua, nueva infraestructura, sistema de alarma, sirena, luminarias y baños operativos. Asimismo, se limpiaron los exteriores, se retiró maleza y se liberaron puntos de iluminación del puente.
Presencia policial garantizada durante todo el día
El coronel PNP Sergio Martín Monroy anunció que dos agentes por turno permanecerán en el lugar las 24 horas. Esta medida busca ofrecer una respuesta rápida ante emergencias y mejorar la vigilancia en una zona estratégica para el tránsito diario.
Mejoras de ornato y adecuación del entorno urbano
La Subgerencia de Ornato ejecutó la limpieza integral del bulevar, retiró árboles no adecuados para el diseño del área e inició la preparación del terreno para la siembra de nuevos plantones, que se colocarán en los próximos días con el fin de revitalizar los espacios verdes.
Ciudadanía pide replicar la intervención en otros puntos vulnerables
Tras la reapertura del PAR, vecinos y comerciantes solicitaron que se intervenga también el puesto ubicado en la zona del exmercado pesquero. La municipalidad ya inició coordinaciones con la Policía para evaluar una acción similar.

