Tras la vacancia por incapacidad moral de la expresidenta Dina Boluarte, el titular del Congreso, José Jerí, asumió la Presidencia de la República. Sin embargo, su llegada al cargo se produce en medio de acusaciones previas por violación y presunta corrupción, que han reavivado el debate sobre la legitimidad de su gestión.
Un mandato marcado por la polémica
José Jerí enfrentó una denuncia por violación sexual en enero de 2025, presentada por una mujer que lo acusó de haberla agredido durante una reunión social el 29 de diciembre de 2024, en el distrito de Canta, Lima.
El caso se archivó en agosto por la Fiscalía, al no encontrarse evidencias suficientes para sustentar la acusación.
“Se ha ratificado lo que siempre dije: no tuve participación directa ni indirecta. Este pronunciamiento fiscal demuestra mi completa inocencia”, declaró Jerí tras el cierre del caso.
No obstante, sectores políticos y organizaciones civiles cuestionaron la rapidez con la que se archivó la denuncia. La Coordinadora Nacional de Derechos Humanos manifestó su rechazo a su elección como presidente del Congreso, incluso antes de que asumiera la jefatura del Estado.
Acusaciones por presunto favorecimiento político
Además del caso judicial, a Jerí se le acusó de corrupción durante su paso por la Comisión de Presupuesto del Congreso, por presuntamente favorecer un proyecto de inversión en Cajamarca.
Aunque no se han formalizado cargos en su contra, el tema continúa bajo observación por parte de la oposición.
Perfil del nuevo presidente
José Jerí nació en el distrito limeño de Jesús María, tiene 38 años, es abogado por la Universidad Inca Garcilaso de la Vega y militante de Somos Perú desde 2013.
Antes de llegar al Congreso, postuló sin éxito a cargos municipales en Lima.
Fue elegido congresista en 2021, con apenas 11 600 votos, tras reemplazar al expresidente Martín Vizcarra, a quien se le inhabilitó pese a haber obtenido más de 200 000 votos.
Durante su labor legislativa, impulsó proyectos en temas de seguridad, educación, empleo y salud, aunque su exposición mediática se ha centrado más en las polémicas que en su producción parlamentaria.
Continuidad hasta 2026
Tras la vacancia de Boluarte, Jerí asume el poder hasta el 28 de julio de 2026, fecha prevista para el fin del actual periodo presidencial. Su principal desafío será restablecer la estabilidad política y la confianza ciudadana, en un contexto de alta desaprobación del Congreso y descontento social.