En Piura, 61 menores de 14 años han sido forzadas a ser madres, hasta el mes de noviembre. Además, una niña de 10 años dio a luz en lo que va del 2021 en la región. Así lo reportó el Sistema de Registro del Certificado de Nacido Vivo en Línea, plataforma del Ministerio de Salud.
La representante de la ONG Centro Ideas, Milagros Mendoza, indicó, a diario La República, que la cifra supera los indicadores reportados durante los últimos cuatro años. Además, explicó que las menores que afrontan embarazos a esta edad, producto del abuso sexual, tienden a ingresar en un ciclo de pobreza y son vulnerables a la violencia.
“Durante un periodo realizamos seguimiento a siete casos en la región, a niñas y adolescentes que fueron víctimas de abuso sexual. En seis de estos casos las menores tuvieron que afrontar un embarazo producto de la violencia; y solo en un caso se logró una sentencia para el abusador”, explicó Mendoza.
Añadió que, pese a que la normativa indica que el Estado debe facilitar la reinserción, la mayoría no continúa con sus estudios ni recibe algún otro tipo de respaldo. Ello reduce en gran medida la posibilidad para acceder a un trabajo bien remunerado y obtener estabilidad económica.
Proyecto de ley
En esa línea, la representante de Centro Ideas resaltó que la aprobación del proyecto de ley que despenaliza el aborto en caso de violación facilitaría a las menores acceder a este procedimiento; ya que existen casos donde se les impide optar por esta opción, pese a que supone un riesgo para la vida de las menores. “El someter a una niña a un embarazo forzado está calificado como tortura”, aseveró.
“También es necesario concientizar al personal de salud y de las comisarías, ya que las mujeres y menores víctimas llegan a estos espacios primeros, donde muchas veces se les desinforma”, añadió.
Además, Mendoza explicó que esta medida sacaría de la clandestinidad a las víctimas de violencia sexual, quienes se someten a los abortos en condiciones insalubres que ponen en riesgo su vida.
Canales de ayuda
Si estás siendo víctima o conoces a alguien que ha sido afectada o involucrada en hechos de violencia familiar o sexual, comunícate de manera gratuita a la Línea 100 del Ministerio de la Mujer y Poblaciones Vulnerables.
Es un canal que cuenta con un equipo especializado en orientar y brindar soporte emocional. Además, la Línea 100 tiene la facultad de derivar los casos de violencia familiar o sexual a los Centros de Emergencia Mujer o al Servicio de Atención Urgente.