Continúa la incertidumbre. El ministro de Defensa, Walter Ayala, fue consultado sobre el destino del cuerpo del genocida y cabecilla de Sendero Luminoso, Abimael Guzmán Reinoso, y coincidió “a título personal” con su colega de Justicia, Aníbal Torres, quien dijo que los restos deben incinerarse y arrojarse al mar; pero aseguró que es competencia del Ministerio Público decidir qué hacer.
“A título personal, apoyo lo que dijo el ministro de Justicia, Aníbal Torres, que el cuerpo debe ser incinerado y arrojado al mar”, indicó. Ayala agregó que “si el cuerpo no se reclama de manera formal; y cumpliendo con todos los requisitos del caso, el Estado debe tomar competencia a través del Ministerio Público”.
En esa línea, Ayala reiteró que comparte la idea del titular del Ministerio de Justicia para “evitar posteriores veneraciones”.
El titular de Defensa arguyó que «las instituciones son autónomas y que como gobierno no se puede intervenir en las decisiones del Poder Judicial o del Ministerio Público”.
Cabe precisar que el último domingo, la Corte del Callao declaró infundado el pedido de la terrorista Elena Iparraguirre, esposa de Guzmán Reinoso, para entregarle el cuerpo del senderista.