Cuando PPK y Fujimori llegaron a la Segunda Vuelta tenía muy claro que PPK ganaría. Sin embargo, la forma como Fujimori arrasó con el Congreso me supo a que el Perú había cometido un grave error histórico o tal vez el mayor de los aciertos. El pueblo ha querido que los dos sectores enfrentados tengan poder. Les ha dado un mandato claro: Ellos deben cogobernar. No hay otra salida. El Fujimorismo debe entender que con esta elección ellos ya son gobierno. Y PPK debe entender eso. Debe tener un acuerdo de gobernabilidad con el Fujimorismo. Y este debe ser público. Eso es lo que el pueblo ha querido. PPK debe librarse de la chaveta que le ha puesto en el cuello el Frente Amplio. Debe dar el paso sin temor y aceptar su realidad. Y el fujimorismo debe aceptar que no le queda otra salida. Cada vez que el fujimorismo quiera ejercer presión se polarizará el país. Y cada vez que PPK ataque al fujimorismo o los provoque pues sucederá lo mismo.

A ambos les corresponde ejercer Liderazgo. Les corresponde sacrificar sus discrepancias y pactar lo sensato. Ellos, ambos, son el Gobierno. La oposición le corresponderá al resto de las fuerzas políticas. Ellos no tienen otra salida. Sino lo hacen, pues el país asistirá a ejercicios constantes de inmadurez. Ambos deben aplicar la Real Poltik. Ni más ni menos.